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Hace algunos días saltaba la noticia de que desde la propia gerencia del Hospital Niño Jesús se había avisado a los trabajadores y trabajadoras de que las obras de construcción de un parking subterráneo sobre el Hospital comenzarían el próximo 3 de octubre.

Un asunto que no es novedoso, puesto que se trata de una iniciativa que la Comunidad de Madrid ya anunció en 2020 y en mayo de 2022, dos años después, se adjudicó su construcción y explotación. No obstante, por aquel entonces, las plazas no llegaban a las 350 (327) y ahora, presuntamente, serán alrededor de 800. Eso sí, ya en ese momento las criticas no dejaron de brotar hacia el gobierno regional, ya que el Hospital se encuentra dentro del Paisaje de la Luz, que cuenta con la categoría de Patrimonio Mundial de la UNESCO, por lo que es un sitio altamente protegido.

De este modo, lo primero que hemos querido saber es cuándo y cómo comenzó la lucha vecinal en Retiro. Así, Félix Sánchez, secretario de la AV Retiro Norte, nos traslada cómo ya antes de la pandemia se han puesto encima de la mesa diversos proyectos para construir parkings en el entorno de El Retiro, unas iniciativas que, tras declararse Patrimonio Mundial el entorno, desde la vecindad "creíamos que esa figura ya protegería el barrio" frente a "proyectos descabellados que siguieran incidiendo en meter más coches al barrio y dañar una zona tan delicada".

¿Cuáles son las consecuencias que tendría su construcción? En primer lugar, "nos arriesgamos a perder la condición de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO". Nos cuenta cómo cuando se otorgó este galardón a la ciudad de Madrid nos pusieron "una serie de deberes y de condiciones", entre ellas, reducir la contaminación y prepararse para la lucha contra al cambio climático.

Por tanto, "cualquier actuación de relieve que se haga dentro del entorno tiene que tener el visto bueno de la UNESCO". De este modo, consideran que 'no es de recibo' que la gerencia del Hospital "amenace con empezar unas obras cuando ni siquiera la UNESCO se ha pronunciado todavía sobre la idoneidad de este proyecto".

Los perjuicios inmediatos que causaría en el barrio son los normales dentro de unas obras. Destacan la situación de un colegio público que se encuentra cerca, donde los niños y niñas "no van a poder utilizar el patio", junto con el cierre de ventanas para evitar el ruido y polvo en las aulas, sumado al miedo de que puedan encontrarse asbestos durante los trabajos, ya que se trata de un edificio cuya construcción es antigua. Reprochan que, en ningún momento, ni el Hospital ni los responsables de la obra se hayan reunido con el AMPA del colegio ni con los vecinos.

¿Qué respuesta se ha dado desde el Ayuntamiento de Madrid?

A pesar de que el Consistorio se ha puesto "de lado", Félix destaca que no se les ha ofrecido ninguna solución. Ven comprensible el 'toque de atención' por parte del gobierno municipal ante la comunicación directa de los vecinos y vecinas con la UNESCO: "estas cosas hay que tratarlas en casa", pero en Retiro han percibido cómo "en casa no funcionan las cosas". Por consiguiente, han trasladado su disposición a judicializar el asunto, "no nos vamos a quedar de brazos cruzados".

"El Ayuntamiento no ha cumplido con sus labores, tiene que hacer un informe de movilidad y otro de impacto ambiental que no han hecho", lo que supone razón de peso para la AV para que las obras no comiencen. "Tiene menos papeles que una liebre", bromea el secretario. Además, se quejan de la falta de comunicación con la vecindad.

¿Y desde la Comunidad?

Apuntan que tuvieron una reunión con la Consejería de Cultura de la Comunidad donde les trasladaron que "ellos no llevaban ese tema" y que tenían que dirigirse directamente a la Consejería de Salud, algo que desde la A.V no entendieron, puesto que se trata de un Bien de Interés Cultural (BIC), lo que sobreentienden que "es una figura de protección jurídica para el patrimonio". Reprochan que la Consejería de Cultura "se lave las manos" y le piden "implicación desde el principio".

De este modo, los vecinos y vecinas han organizado diferentes acciones reivindicativas como una bicicletada durante la Semana Europea de la Movilidad y una concentración que han solicitado frente al Hospital que está a la espera de ser autorizada. Además, ha comenzado una recogida de firmas que, cuando alcance los 10.000, se elevará hasta la Consejería de Cultura, de nuevo.

Félix sentencia que los vecinos y vecuinas no están en contra de que el Hospital tenga un parking adecuado a sus necesidades, "unos 200 y pico coches", ya que entienden que se han perdido plazas de aparcamiento por circunstancias ajenas. Por ello, confirman que "un parking subterráneo de una planta sería suficiente". Por el contrario, consideran que "intentar hacer 800 plazas solamente tiene un motivo de lucro: que salgan las cuentas y les salga gratis la ampliación del Hospital". Finalmente, "no puede ser que un hospital sea la coartada para un negocio de parking".

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