Los padres de un total de once menores han llevado a prisión preventiva al presunto pederasta que llevaba más de diez años trabajando como fotógrafo de moda infantil. El detenido, Pablo J. A., tenía un estudio de fotografía en en madrileño barrio de Usera por el que habrían pasado decenas de niñas con el sueño de convertirse en modelos, según ha adelantado Telemadrid esta misma mañana.
Según cuentan varios padres, el modus operandi del fotógrafo habría consistido en captar, en primer lugar, a las niñas como posibles modelos y, a partir de ese momento, ganarse su confianza y la de sus progenitores invitándoles a todos al Parque de Atracciones. Más tarde, ya dispondría de la suficiente confianza para pedir a los padres que se marchasen para poder trabajar "a gusto" con las niñas.
Este caso nos lleva al mes de marzo de este año, momento en el que se denuncian estos hechos. Presuntamente, el fotógrafo habría entrado al vestidor donde estaban las niñas desnudas y las habría fotografiado sentadas en una silla, con las piernas abiertas y tacándoles la vagina. Ese será el momento en el que, tras enterarse una de las madres de las niñas afectadas, se denuncian los hechos ante la Guardia Civil de Colmenar Viejo. Desde entonces, se habrían producido un aluvión de denuncias desde otros muchos municipios de Madrid, lo que habría dado pie a su detención.
Se hacía el despistado para entrar a los cambiadores
Entre algunos de los hechos relatados por los denunciantes a Telemadrid han destacado los siguientes:
Destaca, además, que el detenido, que se entregó por cuenta propia a la policía en una comisaria de La Latina, ya contaba con antecedentes por estafa. A día de hoy, el juicio aún se encuentra en fase de instrucción en el juzgado 39.