La Federación Española de Diabetes (FEDE) nos ofrece cinco consejos para disfrutar de la Navidad y mantener un buen control de la diabetes
Navidad es una época del año donde un gran número de personas cambian sus hábitos para disfrutar de las tradiciones y de los dulces típicos de cada lugar. Es por esto que, la Federación Española de Diabetes (FEDE) recalca el problema que supone descuidar la alimentación durante las comidas y cenas de Navidad. Esta acción puede desequilibrar el control rutinario de la diabetes y afectar negativamente a nuestro peso y a nuestra salud.
A través de algunas pautas a seguir, las personas con diabetes pueden mantener un buen control glucémico y disfrutar de esta celebración.
Pautas
1. Planificar los menús. Conocer y preparar el menú es un primer paso para conseguir una alimentación equilibrada. Así conoceremos todo el contenido en hidratos de carbono de los alimentos, su tipo de absorción y prestaremos especial atención al etiquetado de los mismos en el momento de su compra.
2. Controlar las cantidades. Para conseguir un menú saludable, debemos incluir una gran variedad de alimentos frescos y cocinados, prestando especial atención a los que aportan una mayor carga de carbohidratos. Es aconsejable minimizar las preparaciones ricas en grasas y azúcares.
3. Jugar con las raciones. Lo ideal, para las personas que regulan su dieta midiendo las raciones de hidratos de carbono, será buscar las equivalencias de algunos alimentos habituales y los típicos de estas fechas. De esta forma se evita alterar las dosis de fármacos habituales, tanto de insulina como de antidiabiabéticos orales.
4. Apostar por el verde. Las frutas, verduras y hortalizas pueden aportar a los platos una gran variedad de texturas, colores y sabores y son la mejor opción para acompañar los platos principales.
5. Cuidar y contrarrestar los excesos. Es importante no descuidar los controles habituales de glucosa y consultar con el profesional sanitario de referencia qué hacer ante posibles picos de glucemia. Además, no se debe olvidar el ejercicio físico como parte de nuestra rutina habitual.
Una propuesta de menú para no tener que prescindir de los deliciosos dulces navideños
Propuesta de menú navideño
Entrantes y primeros platos. Es recomendable apostar por la preparación de verduras a la plancha, como espárragos trigueros, alcachofas o champiñones rellenos de requesón. Las ensaladas también aportan volumen y pueden aderezarse con un toque ácido, de limón. Los crustáceos y moluscos preparados al vapor, como mejillones, almejas y pulpo, son otra opción saludable.
Segundos y guarniciones. El plato principal debe ser ligero y estar preparado de forma saludable. Algunas opciones son una base de pescado o cortes de carne magros, de ternera, cerdo o pavo, hechos al horno o la plancha. En las guarniciones, es preferible recurrir de nuevo a las verduras o bien controlar muy bien la cantidad en caso de que se opte por opciones más ricas en hidratos de carbono como, por ejemplo, patatas asadas.
Postres y dulces navideños. Se debe tratar de que contengan una cantidad de azúcar reducida y complementarlos con opciones más ligeras como fruta cortada y acompañada, por ejemplo, de yogur. También se puede sustituir una porción habitual de hidratos de carbono por, por ejemplo, una ración de turrón de unos 25 gramos o una porción de mazapán.
Bebidas. La primera opción siempre debe ser el agua y se debe moderar el consumo de bebidas alcohólicas, tanto las destiladas como las fermentadas, porque aportan hidratos de carbono que también se han de contabilizar.