Este navegador no soporta este formato de vídeo.
Durante las últimas semanas publicábamos en este medio varias noticias sobre el Parque Tecnológico de Valdemingómez (PTV) y su entorno. Por un lado, los avisos desde diferentes organismos de los niveles de contaminación que se alcanzan en los alrededores de las diferentes plantas de tratamiento de residuos y, por otro lado, el episodio político vivido con la incineradora donde, tras un convenio firmado en 2019 por la Mancomunidad del Este, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento, Valdemingómez recibiría 165.000 toneladas de residuos en sus instalaciones provenientes de la Mancomunidad.
Así, y en aras de aclarar lo ocurrido y saber la opinión y la información con la que cuentan desde las diferentes asociaciones vecinales y desde la Federación, en general, hemos hablado con Enrique Villalobos, el presidente de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM).
Lo primero en lo que Quique ha incidido es que el Parque Tecnológico de Valdemingómez es un complejo compuesto por siete plantas, entre las que se encuentran el vertedero, la incineradora y otro tipo de instalaciones que van desde digestores a una incineradora de animales muertos, plantas de clasificación, un gasómetro para enriquecer el gas que se genera con la vida de gestión y también está prevista una gran planta para el compostaje. En resumidas cuentas y en palabras del presidente de la FRAVM: "un espacio donde llega toda la basura de Madrid". ¿Lo peor? Está a escasos dos kilómetros de las viviendas ubicadas en el Ensanche de Vallecas.
En cuanto al convenio firmado por las tres autoridades madrileñas, la FRAVM se muestra ligeramente esperanzada, ya que, en principio y por lo que ellos saben, la basura de la Mancomunidad del Este "ya no está llegando" a Valdemingómez. No obstante, esta acción llega tarde, ya que estaba prevista para mucho antes. Lo que está ocurriendo actualmente es que "La Mancomunidad está enviando todo lo que produce a su planta de tratamiento en Loeches y Madrid, por el convenio que se firmó, ahora tendría que enviar una cantidad equivalente que se recibió a la planta de Loeches para su tratamiento".
Sin embargo Quique apunta que el tema está "bastante enquistado". Por el momento, "Madrid no está llevando residuos a la Mancomunidad". Un hecho que desde la FRAVM no tienen muy claro cuál es su motivo, pero creen que se trata de un desacuerdo político sobre las toneladas a devolver y sus condiciones y que, una vez más, perjudica a los vecinos. A pesar de que las instituciones hayan llegado a un acuerdo "en el último momento", para evitar que el tema se judicialice, tal y como amenazaban desde el Ayuntamiento de Madrid, "lo que no significa que se estén devolviendo aún esos residuos a la Mancomunidad".
El problema que tenemos es que el Ayuntamiento es muy opaco en lo que es el PTV. Hay un oscurantismo absoluto. No se publican memorias desde 2019. Una verdadera barbaridad. Todo lo que acabamos sabiendo es porque se hace una pregunta en un Pleno o cosas así - Quique Villalobos
El mayor problema de los vecinos y vecinas con el PTV es que "el Ayuntamiento es absolutamente hermético". Así, "la falta de información es uno de los mayores problemas" que tienen. El Ayuntamiento "no da información. Solamente cuando se pide por vía oficial, por transparencia y no tiene, hoy por hoy, ningún sistema de información para la ciudadanía". Algo inconcebible puesto que a dos kilómetros las viviendas del Ensanche de Vallecas sufren las consecuencias de la gestión de estos residuos muy de cerca.
Para cifrar en datos lo que ocurre en Valdemingómez es conveniente ponernos en contexto: "Imaginaos lo que es que solamente de Madrid entren cada día 900 camiones de basura con entre 3.000 y 4.000 toneladas diarias y que a eso se le sume toda la basura de la Mancomunidad Este". Además, los problemas que esos residuos suponen "se han multiplicado con el tiempo y el Ayuntamiento no ha tenido ni siquiera la decencia de tener una página web donde fuese informando de los residuos que iban llegando y del tratamiento que se les estaba dando".
Otro de los aspectos a tener en cuenta es el incumplimiento de los acuerdos hasta los que se habían llegado ya. Desde la FRAVM, creen que una parte de los residuos han sido incinerados, algo que Quique nos comenta que en el convenio no estaba permitido. Además, "ha incinerado por encima de lo que se venía hasta la fecha, que era el máximo permitido".
###59269##
Lo que los vecinos exigen es "el cierre de la incineradora en el menor plazo posible" o, al menos, la desconcentración en la gestión de residuos en la ciudad. Una medida que ya estuvo encima de la mesa cuando "en el mandato anterior se aprobó una estrategia de residuos". Por desgracia, este plan ha sido anulado por el actual gobierno municipal tras un entramado legal que Quique nos cuenta. Lo que se planteó en papel fue que en 2022 Valdemingómez "debía incinerar la mitad de lo que se venía haciendo y en 2025 la incineradora debía cerrar". Lo único que saben desde la FRAVM es que "en 2019 se incineró más que en toda su historia".
"Parece que el problema está desbocado y este Ayuntamiento no quiere dar solución a una instalación que es altamente peligrosa", demostrado por varios estudios e informes, apunta Quique. Como ejemplo, nos habla de la gente que vive en la Cañada, tiene gallinas y come de sus huevos, "triplica la cantidad de dioxinas y furanos permitidos". De esta manera, los niveles de contaminación en Valdemingómez "triplican los del distrito Salamanca".
Los madrileños comprenden que la materia orgánica que hasta ahora se está incinerando en Valdemingómez "podría ser gestionada también en otras plantas repartidas por la ciudad de una manera mucho más eficiente y, por lo tanto, mucho más eficaz".En definitiva, que desaparezcan los malos olores que los vecinos del Ensanche tienen que aguantar. Se trata de amortiguar las instalaciones, pero que no sea a costa de la salud de los vecinos.