El cambio de uso de un local comercial a vivienda es una práctica cada vez más común, especialmente en zonas urbanas donde los precios de la vivienda se han incrementado y la demanda de espacios habitables es alta.
En la mayoría de los casos este proceso no es sencillo y requiere cumplir con una serie de normativas urbanísticas y requerimientos administrativos para garantizar que el nuevo espacio cumpla con las condiciones mínimas de habitabilidad.
Por eso es muy importante ponerse en manos de profesionales como Arquitectura 71 para que te ayuden con todos los trámites y gestiones necesarios a la hora de cambiar el uso de un local a vivienda.
En primer lugar, es necesario consultar la normativa urbanística local, ya que cada municipio puede tener sus propias regulaciones respecto al cambio de uso. En algunas áreas, los planes urbanísticos pueden prohibir o restringir este tipo de modificaciones. Por lo tanto, antes de iniciar cualquier proceso, hay que verificar si el local en cuestión se encuentra en una zona donde esté permitido realizar el cambio de uso o no.
Una vez confirmada la viabilidad urbanística, es necesario solicitar la licencia de cambio de uso en el ayuntamiento correspondiente. Para ello, se debe presentar un proyecto técnico elaborado por un equipo de arquitectos como los de Arquitectura 71, que certifique que el local cumplirá con todos los requisitos de habitabilidad.
Entre los aspectos a tener en cuenta están la ventilación, iluminación, aislamiento acústico y térmico, la altura mínima del techo, y la existencia de zonas húmedas como baño y cocina. Además, el inmueble debe contar con los suministros necesarios de agua, electricidad y gas, en caso de ser requerido.
Además, el cambio de uso también implica, en muchos casos, una reforma integral del local para adaptarlo a su nueva función como vivienda.
Este proceso puede ser más o menos complejo dependiendo del estado del local y las modificaciones que haya que realizar para cumplir con las normativas vigentes. Además de las obras de reforma, también es necesario actualizar el registro del inmueble en el catastro y en el registro de la propiedad para reflejar su nuevo uso.
En último lugar, hay que tener en cuenta que el cambio de uso puede afectar a la fiscalidad del inmueble, ya que, al pasar de ser un local comercial a una vivienda, las obligaciones tributarias pueden variar, especialmente en lo referente al Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y otros tributos locales.
Ponerse en manos de profesionales del sector resulta imprescindible en estos casos con el fin de simplificar el proceso y agilizar la ejecución. En Arquitectura 71 se encargan de todo, para que tú solo tengas que preocuparte de disfrutar de tu nueva vivienda.