Es luchadora, perseverante; es sinónimo de superación, de alegría y fortaleza. Así es Sandra Aguilar, nuestra deportista madrileña que lleva a sus espaldas un campeonato europeo y otro del mundo, varias copas del mundo, dos Juegos Olímpicos y un largo etcétera que le han hecho ganar, nada más y nada menos, que 42 medallas.
Hemos tenido, por segunda vez, la oportunidad de hablar con ella y de intercambiar formas de entender la vida y el deporte. “Compaginamos estudios con deporte, algo muy importante, porque la vida de un deportista no es para siempre”, nos cuenta. Una forma de vida desde la mirada de una gimnasta que ha logrado todos los objetivos y metas que se ha propuesto a lo largo de su trayectoria deportiva.
Persiguiendo sueños
El Club Gimnástico Aldava ha sido el encargado de acercarnos a Sandra Aguilar, de darnos la oportunidad de conocerla, un poquito más, tanto a nivel personal como a nivel deportivo gracias a una Masterclass que se celebró en el Colegio Altamira de Fuenlabrada y que ha ayudado a más de 60 niñas a comprender que todo, con ganas, puede lograrse. “Si tienes un sueño hay que luchar hasta alcanzarlo. Nunca me imaginé llegar hasta donde he llegado”. Nuestra gimnasta dio una clase de entrenamiento a las alumnas del club, quienes la recibieron con los brazos abiertos y las pilas cargadas.
Sandra Aguilar durante la Masterclass / Imagen: Redacción
Pudimos remontarnos a los inicios, al momento en el que Sandra Aguilar empezó a formar parte de la selección española, momento que quiso recordar junto a nosotros: “es tu sueño. Te seleccionan para el equipo, pero hasta que no pasan los años no te das cuenta de lo que eso conlleva. Al fin y al cabo, estás representando a tu país de la mejor manera posible”, y afirma que es de las mejores cosas que le han pasado en su carrera como gimnasta.
La rítmica, un deporte en auge
Es cierto que este deporte es algo minoritario, que está comenzando a emerger y que, poco a poco, se va conociendo más. “Es difícil. El deporte femenino, aunque está ahí arriba, sabemos que cuesta mantenerlo. Es algo con lo que contamos, aunque la idea es trabajar, trabajar, conseguir objetivos y que los medios te reconozcan un poquito más”, explica Sandra.
“Yo empecé como cualquiera de las que estáis aquí hoy, practicando la gimnasia rítmica porque me gustaba. Pero, poco a poco, con ilusión, esfuerzo y sacrificio pude ir consiguiendo mis retos, y es cierto que hay momentos muy difíciles y también satisfactorios”. Retos que diariamente se propone y que, gracias al apoyo de su familia, de amigas y compañeras sobre el tapiz, ha logrado consolidar y situarse en lo más alto de esta modalidad.
Más de 60 niñas participaron en la Masterclass / Imagen: Redacción
Sobre el tapiz improvisado de esta Masterclass, las pelotas caían una y otra vez, y nuestras chicas del Club Gimnástico Aldava las recogían de nuevo. Todo por lograr ser como Sandra Aguilar. Muchas de ellas tiraban la toalla, pero gracias a la perseverancia y a la insistencia de nuestra gimnasta volvían a lanzarla de nuevo, esta vez con un resultado mucho más positivo. Como reflexión, les hacía ver que “hay momentos duros, en los que realmente te planteas si merece la pena seguir o no, pero creo que, esos momentos, son los que te hace ser más fuerte. Eso es lo que hace que no tiremos la toalla”, concluye.
Por último, Sandra Aguilar quiso terminar esta Masterclass lanzando a las gimnastas presentes un gran mensaje: “en la vida hay momentos difíciles, pero hay que superarlo, porque es lo que realmente te da esa fortaleza para afrontar las situaciones de otra manera. Así que, os animo a todas a que cada una, a su respectivo nivel, el objetivo que se proponga luche hasta conseguirlo porque se puede”.