A partir de la noche de hoy, la Carretera de Colmenar (M-607) y el Paseo de la Castellana estarán más unidos. En concreto, por medio de un viaducto que tiene como objetivo de mejorar las comunicaciones por carretera de la ciudad y, además, acabar con el trenzado viario de aquellos vehículos con destino en el Nudo Norte en dirección a la M-11/M-30 o al Paseo de la Castellana.
Así, las zonas como Tres Cantos, Mirasierra, Herrera Oria o Montecarmelo tendrán una conexión directa con el Paseo de la Castellana. De esta manera se prevé un ahorro de tiempo en hora punta que puede llegar al 31%, es decir, 3.667 horas por día. Desde el Consistorio se ha hecho la estimación de que alrededor de 20.000 vehículos atravesarán esta nueva infraestructura de 206 metros.
El Nudo Norte cuenta con una circulación diaria de 34.000 vehículos en hora punta y de 33.800 por la tarde
Desde el Área de Movilidad han querido poner el foco en el sistema de iluminación integrado en el propio viaducto que eliminará los molestos báculos de gran altura que se encuentran actualmente. Con esta herramienta se pretende disminuir las molestias a vecinos de la zona con la luz y que disminuyan los ruidos con la plantación de árboles entre las calles Pedro Rico y Calle 30, en el talud.
Es la primera de las cuatro intervenciones por la que se eliminan los trenzados viarios que se esperan con la remodelación del Nudo Norte, que busca reducir las congestiones de tráfico, como apuesta parte de la Estrategia de Movilidad Sostenible Madrid 360. La actuación se llevará a cabo a lo largo de 150.000 metros cuadrados mediante la tecnología BIM (Building Information Modeling).
###57011##