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El Partido Socialista de Majadahonda pone el foco en las “quejas” de residentes, familias y trabajadores de la residencia municipal `Albertia Valle de la Oliva´. Una situación que ha alertado a la formación política solicitando que “se realice urgentemente una inspección no programada en el centro para garantizar la seguridad, la calidad del servicio y las condiciones laborales de los trabajadores”.

Según explican desde el grupo político, las quejas eran “desgarradoras. Desde mayores que no desayunan y toman su medicación hasta las 11 de la mañana por falta de personal que les ayude a levantarse y asearse, comida seca o de poca calidad y falta de personal de forma generalizada… es el escenario en el que coinciden y conviven los usuarios del centro”.

Desde el Partido Socialista han continuado diciendo que esta residencia cuenta con 130 plazas, de las que 12 están concertadas con el Ayuntamiento y 26 con la Comunidad de Madrid, en lo que respecta al centro de día. “Actualmente, aproximadamente el 50% de los residentes son grandes dependientes que necesitan mucho más cuidados y atención del personal del centro. Trabajadores que sufren una brutal presión asistencial y que no llegan a cubrir unas garantías los cuidados de todos los mayores en detrimento del servicio que se presta a un coste estimado de 2.700 euros por residente”, señala el portavoz socialista, David Rodríguez Cabrera.

Al parecer, el centro de día cuenta con “un solo trabajador para atender a 28 mayores, de los cuales hay que trasladar a 20 para el cambio de pañales”. De hecho, confirman que esta situación “empeora” en el turno de noche, que “cuenta con dos trabajadores para cubrir las necesidades de los 115 residentes”. Pero esto no es todo, el Partido Socialista anuncia que “solo hay dos trabajadores para fisioterapia, por lo que les es materialmente imposible dar el servicio a todos los mayores que lo necesitan”.

Desde SoydeMadrid.com nos hemos puesto en contacto con el Ayuntamiento de Majadahonda, quienes se han “interesado por la cuestión”, y aseguran que “la residencia ha sido inspeccionada en hasta siete ocasiones, en los últimos dos años, por la Comunidad de Madrid, sin que se hayan detectado hechos graves”. Es más, desde el Consistorio están planteando una nueva inspección próximamente.