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¿Qué pasará finalmente con Huerta Vieja?. Durante la pasada legislatura gran cantidad de vecinos y partidos de la oposición sacaron a la luz la “penosa situación” en la que se encontraba la piscina cubierta de Huerta Vieja, además de mostrarse en contra por la gestión del antiguo equipo de Gobierno. Sin embargo, parece que con la nueva alcaldesa, Lola Moreno, las tornas han cambiado.

La edil ha tomado la decisión de no derruir la clausurada piscina. Ha tenido que llegar otra persona para que tras estudiar la situación y los diversos informes técnicos de la Concejalía de Urbanismo, Vivienda, Obras e Infraestructuras, llegaran a la conclusión de que la piscina, que está cerrada por problemas estructurales, sí tiene arreglo.

Se encargará un proyecto de remodelación integral de la misma que solucione los dos problemas principales que tiene la instalación. Por una parte, garantizar la seguridad de la estructura del edificio, y por otra, el arreglo del vaso de la piscina, que actualmente no se puede usar por las deficiencias que presenta.

Pero este proyecto no solo va a dar solución a los problemas que presenta esta instalación, si no dará un paso más allá y mejorará las instalaciones para el uso de los vecinos y vecinas. Lola Moreno destaca que “aprovechando el calado de la intervención que vamos a llevar a cabo en la piscina de Huerta Vieja, vamos a actuar de manera integral para mejorar el uso de la misma. Se aumentarán las calles de la piscina, tendrá un nuevo almacén de enseres, e incluso contaremos con un nuevo vestuario infantil”. Además, el proyecto mejorará la calidad del suelo que rodea el vaso de la piscina, la llamada ´zona de playa´ de la misma.

Dentro de esta remodelación integral, el Ayuntamiento de Majadahonda también tendrá un compromiso con el medio ambiente, que necesariamente se verá reflejado en el diseño y mantenimiento de la instalación, con el empleo de energías renovables, la atención prioritaria a criterios de eficiencia energética y la eficiencia en los consumos de agua y energías.

Asimismo, se va a aprovechar para realizar una actualización de las instalaciones con unos exigentes niveles de seguridad, accesibilidad, control, protección y usos sociales complementarios. Para la actuación global, se estima un presupuesto aproximado de en torno a 4 millones de euros en ejecución plurianual.

En palabras de la alcaldesa Lola Moreno, “la piscina lleva cerrada dos años por problemas estructurales y es nuestra prioridad poder devolver su uso a todos los vecinos. Pero lo vamos a hacer mejorando lo que tenían, y con total garantía de seguridad, para que su disfrute vuelva a ser una realidad duradera en el tiempo”. Una noticia que alegará a todos los vecinos y vecinas de Majadahonda que han estado reclamando el acceso de estas instalaciones.

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