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Valle Luna deja la alcaldía presumiendo de sus cuentas en el Ayuntamiento
La ex alcaldesa del PSOE muestra el arqueo de la decena de cuentas bancarias del consistorio
Moraleja de Enmedio |

El pasado 17 de junio la socialista Valle Luna dejó de ser alcaldesa de Moraleja de Enmedio. A pesar de haber ganado las elecciones, un acuerdo del PP y de Vox ha apartado a la ya ex regidora de la alcaldía ocho años después de su primera toma de posesión.

Durante todos estos años, los equipos de Gobierno del PSOE han tenido que gestionar un Ayuntamiento que se encontraron en ruina económica tras los años de gestión de Carlos Estrada. Y ahora comparan la situación de las cuentas del consistorio con la de 2015.

Valle Luna ha explicado que entonces encontraron en las cuentas municipales, es decir, el dinero en caja, un montante de 30.000 euros. Con eso tuvieron que comenzar su difícil gestión, hacer frente al pago de las nóminas de los trabajadores municipales, de los servicios básicos (luz, agua, teléfonos, etc). Sin embargo, ahora dejan al nuevo gobierno un líquido de 2.788.054, 65 euros.

La ex alcaldesa y el resto de su equipo, Gregorio Olmos, Mª Ángeles Fernández, Fernando Labrador, Paqui Mora, Josu García y Mónica García han dejado una situación económica mucho mejor que la que se encontraron y por eso ahora lo expresan con orgullo.

En la Caja Fija de cada una de la concejalías ha quedado a cero, sin deudas pendientes que tenga que afrontar el nuevo Gobierno local

Valle Luna ha compartido un documento con el arqueo de las cuentas que están a nombre del Ayuntamiento con la situación a 15 de junio de 2023. En el Banco de Santander hay seis cuentas con cantidades que van desde los 2,2 millones a los 20.000 euros. En La Caixa el consistorio dispone de cuentas con 237.000 euros, 69.000, o 30.000.

Además, en la Caja Fija de Servicios, de Hacienda, de Festejos, de Policía, de Deportes, de Cultura, de Educación, de Mayores, de Educación, de Participación Ciudadana, de Cultura, de Deportes, de Juventud, de Urbanismo o de Igualdad el saldo está a cero. Es decir, no queda ninguna deuda pendiente que tenga que asumir la nueva corporación.