La alcaldesa Noelia Posse (PSOE) y el concejal del PP, Eduardo Santiago, van a dar por finalizado su desencuentro judicial por injurias y calumnias, con un acto de conciliación que se celebrará el próximo jueves en un juzgado de Móstoles.
Aunque ninguna de las dos partes ha querido hacer declaraciones a este medio, este acto da por finalizada la denuncia que interpuso el concejal del Partido Popular a finales de junio, por injurias y calumnias contra la alcaldesa de Móstoles y el portavoz del PSOE, Alejandro Martín, referidas a unas declaraciones que se hicieron en un pleno de marzo con relación al positivo en Covid del concejal de la oposición.
Este procedimiento judicial evita el pleito al que ambos estaban abocados tras la denuncia, y se consigue gracias a un acuerdo de ambas partes, del que no se saben los detalles pues ninguno de los dos ha querido hacer declaraciones al tratarse de un "tema personal".
El acto de conciliación evita el pleito al que se iban a enfrentar ambas partes tras la denuncia
Para entender lo sucedido hay que remontarse hasta marzo de 2021, cuando en plena campaña para las elecciones autonómicas de la Comunidad de Madrid, el concejal Eduardo Santiago del PP de Móstoles, dio positivo en Covid-19.
Días después del positivo, desde el Ayuntamiento de Móstoles se decidió convocar un pleno extraordinario para reprobar a la portavoz de su partido, Mirina Cortés, "por no haber informado del positivo de uno de sus concejales en Covid-19 que no permitió aplicar desde el primer momento los protocolos preventivos para detectar posibles nuevos contagios".
La moción fue aprobada por todos los grupos municipales, a excepción del PP y VOX ya que, "en lugar de actuar con responsabilidad, el PP decidió continuar con sus actos de campaña sin cumplir la cuarentena preventiva tras un contacto con un positivo. Una cuarentena de diez días que, tal y como establece la Comunidad de Madrid, es obligatoria incluso aunque las pruebas de detección del virus den negativas".
Tras su recuperación, el concejal Eduardo Santiago decidió interponer la denuncia porque "las acusaciones se han demostrado totalmente infundadas" y creía que esta era la única vía para restituir "su honor".