El mantenimiento del Conservatorio Rodolfo Halffter brilla por su ausencia. La caída el pasado lunes de un falso techo en uno de sus pasillos ha sido la gota que ha colmado un vaso lleno de desperfectos, llevando a la denuncia por parte de alumnos, padres y profesores de esta institución del mantenimiento abandonado del edificio por parte de la empresa Cofely.
Un problema que se suma a muchos otros
Esta caída no ha sido del todo una sorpresa, ya que el director del Conservatorio, Mateo Lorente, ya había dado aviso de las grietas que estaban abriéndose en el mismo. Afortunadamente todo quedó en un susto, pero la sensación de peligro dentro del edificio se ha visto engrandecido, a pesar de la revisión de todos los falsos techos que se ha producido tras la caída.
Este incidente se une al de los baños clausurados, agua no potable (debido a altos niveles de hierro) o ascensores averiados, que traía frustrados tanto al personal del centro como a los alumnos. Desde el Ayuntamiento apuntan a que, al ser responsable la empresa Cofely, no pueden ocuparse de este mantenimiento. El concejal responsable del mantenimiento de los edificios públicos, Miguel Ángel Ortega ha señalado un incumplimiento de las obligaciones de la empresa, aunque no pueden prescindir de ella hasta concluirse el contrato, por lo que las intervenciones por parte del Consistorio se realizan con personal municipal.
En cuanto al cambio de la red de agua, que ha supuesto el cierre de los baños, Ortega ha apuntado que debería estar resuelto en pocas semanas. Mientras, los alumnos y profesores permanecen a la espera de que el edificio en el que trabajan tenga unas condiciones aceptables.