El Centro Sociocultural Joan Miró acoge la exposición de Estefanía Sanz “Una mirada microscópica”, que se puede visitar hasta el 2 de enero de 2024. Se trata de una propuesta basada en la disciplina escultura-mosaico, que invita al espectador "a cambiar su perspectiva de la vida y a valorar la belleza oculta que nos rodea". Este proyecto representa el fascinante encuentro entre la ciencia y el arte, y guía con su habilidad artística "hacia un mundo asombroso que generalmente pasa desapercibido".
A través de la artesanía del mosaico, la artista selecciona cuidadosamente materiales como vidrio, minerales y piedras preciosas que corta y talla uno a uno antes de ensamblarlos entre sí. Cada tesela es una pequeña escultura, y cada pieza parte de un soporte en blanco en el que traza a mano y de manera improvisada las formas que posteriormente serán cubiertas de mosaico. El factor común en la mayoría de ellas es el protagonismo de un elemento central, rodeado por distintas formas y materiales que lo ensalzan. Esto hace que se cree un patrón hipnótico enfatizado por la textura de los materiales, que invita a la recreación y la meditación.
Con este trabajo, invito a reflexionar sobre la relación entre el ser humano y la naturaleza
“Estas obras trascienden los límites de la representación artística para llevarnos a un reino donde la estética y la realidad científica se entrelazan de manera armoniosa. Con este trabajo, invito a reflexionar sobre la relación entre el ser humano y la naturaleza, lo visible y lo invisible”, explica la propia autora.