Diana Martín no necesita presentación. Su talento la ha llevado, a lo largo de su carrera, a participar en dos Juegos Olímpicos -Londres y Río-, además de ser bronce en los 3.000 obstáculos en el Campeonato de Europa. Logros que han avalado una trayectoria en la que sigue consiguiendo éxitos.
Ahora, la mostoleña disfruta del deporte desde otro prisma, probando distancias y modalidades en las que demuestra que no importa el terreno, sino la calidad del atleta. Así nos lo enseñó en la última edición de la Behobia-San Sebastián, una de las pruebas más duras de media distancia en la que consiguió quedar segunda.
En el Cross Internacional de Alcobendas, fue novena, pero se convirtió en la quinta corredora nacional en cruzar la meta
Sin embargo, Diana Martín mostró su decepción al no conseguir un primer puesto que persigue desde hace dos años. Si el año pasado se quedó a las puertas de lograr la txapela, que quedó en manos de Alba Merino, este año catorce segundos la separarían de su gran objetivo. La victoria sería para Gema Barrachina.
Y sin más tiempo para analizar ese segundo puesto, Diana Martín afrontaba la vuelta al Cross. En primer lugar, con la participación en el Cross de Soria, donde quedó novena en la clasificación general y fue la séptima española. En segundo lugar, en el Cross Internacional de Alcobendas, en el que repitió puesto en la general, pero se convirtió en la quinta corredora nacional en cruzar la meta.
Un buen mes para la mostoleña que sigue mejorando en sensaciones, lo que será clave para afrontar el resto de la temporada.