Móstoles ha registrado el primer brote por COVID-19 en una fiesta en un local de ocio nocturno. Se han detectado 5 casos positivos y 11 personas están bajo vigilancia por contacto directo. Ninguno es vecino de nuestra localidad. Los contagios tuvieron lugar el pasado 13 de julio en Velvet Rose. La alcaldesa, Natalia Posse, pide a la Presidenta de la Comunidad de Madrid más medidas para evitar los contagios y más rastreadores para atajar la expansión del virus.
Desde la Concejalía de Urbanismo se habían abierto varios expedientes contra este local por infracciones de la Ley 17/1997, de 4 de julio, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas y de los protocolos marcados para prevenir la expansión de la COVID-19, según informa el Ayuntamiento de nuestro municipio. La última infracción fue la fin de semana del 4 de julio, cuando los responsables del local impidieron la entrada de la Policía Municipal mientras realizaban controles para comprobar que se respetaban todas las medidas que regulan la apertura de este tipo de locales y las establecidas para prevenir la expansión del coronavirus.
La Concejalía de Urbanismo procedió al cierre cautelar del local la noche del 13 al 14 de julio.
La Comunidad de Madrid es la responsable de las sanciones en materia de COVID-19. Por ello, el Gobierno de Móstoles le ha trasladado todos los expedientes solicitando al Gobierno autonómico para cerrar de manera urgente el local. Por responsabilidad con la ciudadanía y adelantándose a las posibles actuaciones de la Comunidad de Madrid, la Concejalía de Urbanismo procedió al cierre cautelar del local la noche del 13 al 14 de julio.
Desde el Gobierno Local piden a la población que actúe con responsabilidad y colabore en la lucha contra la COVID-19. Respetar las medidas establecidas para prevenir la expansión del virus es la única forma de minimizar los riesgos que entraña la enfermedad. El uso de mascarillas cuando no se puedan guardar las distancias sociales es clave como medida de protección frente al coronavirus.