Amanecer Bailando, el festival de la discordia que ha puesto en pie de guerra a los vecinos contra el Ejecutivo mostoleño, ha finalizado con una afluencia de alrededor de 25.000 personas, 17 horas ininterrumpidas de “música a todo trapo, ruido, botellones y destrozos”, y la mayor indignación vecinal y política que aquí se recuerda.
Desde que la noticia de la celebración del festival saltara a las calles a comienzos del verano, la polémica ha estado servida. Sin embargo, y según lo esperado, lo peor estaba por llegar una vez la música hiciese vibrar, no sólo a los asistentes, sino al municipio entero ante la ineficacia de las medidas llevadas a cabo para una supuesta “conciliación vecinal”. El evento, que se prolongó en el Prado Ovejero durante cerca de 18 horas, incendió los ánimos de las mostoleños, quienes dejaron patente su enfado, apatía y descontento en las redes sociales a causa del ruido y la suciedad.
La cara B de un festival “non stop”
Las 17 horas de música “non stop” no fueron suficientes para los casi 25.000 asistentes que se congregaron el pasado sábado en el Parque de la localidad Prado Ovejero; al igual que tampoco lo fue el dispositivo policial allí desplegado para evitar que cientos de jóvenes continuaran la fiesta pasadas las 10 de la mañana. Tras el sonido producido por la última nota, riadas de jóvenes, con evidentes signos de haber consumido alcohol y otras drogas, improvisaron una “rave” en la explanada aledaña a la Plaza de Toros de la localidad.
Vibración en los cristales, "música a todo trapo", jóvenes orinando en la vía pública o quejas por un botellón "permitido" que se ha extendido más allá de la superficie que conforma el parque Prado Ovejero, han centrado las protestas contra la alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse, de quien ya se pide la dimisión.
Se cuentan por cientos las fotos y los vídeos colgados en las redes sociales donde se aprecia notablemente el alto volumen del sonido, que se llegaba a escuchar en 2,5 kilómetros a la redonda, según las cifras aportadas por EFE.
A pesar de los esfuerzos llevados a cabo por los operarios de limpieza para recoger las toneladas de basura esparcidas por las calles, plazas y parques, los residuos inundaban nuestra localidad. “Está todo hecho una porquería", denunciaba Emilio, un vecino que ayer tuvo que colocar toallas en el hueco entras las ventanas y persianas para mitigar el fuerte retumbo. "Ya el día de antes, con las pruebas de sonido, nos dimos cuenta que iba a ser una locura”, proseguía, sin comprender la decisión de la alcaldesa de autorizar un evento de estas características a menos de 50 metros de viviendas.
Las redes cargan contra Amanecer Bailando/ Twitter. Daniel Gómez.
Posse, en el punto de mira
Las primeras reacciones procedentes de los partidos políticos no han tardado en llegar. El segundo teniente de alcalde y portavoz de Ganar Móstoles, Gabriel Ortega, que se ha mostrado muy crítico durante todo el verano con la celebración de este festival y con sus colegas del Gobierno del PSOE, ha asegurado a través de las redes que esto marcará “un antes y un después” en el Gobierno municipal. Así, en un vídeo publicado en las redes sociales, justo antes del esperado punto y final del evento, Ortega catalogaba como barbaridad y disparate la situación que allí se estaba viviendo, y proseguía, “un evento de estas características no puede enclavarse en un parque urbano, con viviendas a menos de 50 metros”. Además, concluía con que la situación se merece “reflexión y cambios”.
El concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines y Limpieza Viaria, Miguel Ángel Ortega, acudió hasta una de las praderas del parque y el panorama que se encontró fue devastador. “Los daños van a tardar meses en recuperarse y, desde luego, dudamos mucho de que alguien responda por esta barbaridad”, aseveraba con el foco puesto en los desperfectos ocasionados en el mobiliario urbano y en la vegetación. “Se les ha sometido – a los locales- a una tortura de música machacona, superando los cien decibelios”.
El diputado de Podemos en la Asamblea de Madrid, Emilio Delgado, vecino de Móstoles, ha cargado hoy contra la alcaldesa de la localidad, la socialista Natalia Posse por la celebración del festival Amanecer Bailando y ha asegurado que Ganar Móstoles no abandona el Gobierno local para no dar la alcaldía al PP.
Los vecinos de Alcorcón residentes en el barrio de Fuente Cisneros, ubicado muy cerca del recinto festivalero, también mostraron su indignación en las redes. Desde el Consistorio liderado por David Pérez, han anunciado un servicio de atención y asesoramiento ante las molestias por la celebración del festival a través de los servicios de Consumo, después del intento fallido de que el festival se suspendiese de forma cautelar por exceso de decibelios.
Las redes cargan contra Amanecer Bailando/ Twitter Ramón Fernández Tri.
“Si no me acuerdo, no pasó”
La alcaldesa socialista de Móstoles, Noelia Posse, muy activa en redes sociales, dedicó horas a contestar a las críticas emitidas mediante tweets dirigidos personalmente a ella en los que la hacían responsable del caos en el que estaba sumido nuestro municipio.
A pesar de las disculpas hechas públicas desde el Ayuntamiento mostoleño y la insistencia de que “la celebración de un festival en el parque Prado Ovejero es excepcional, puesto que el Ayuntamiento busca una ubicación alternativa para eventos similares de cara al futuro”, el propio Consistorio aseguró que el festival se desarrolló “según lo previsto”, “sin incidentes dignos de reseñar” y “sin problemas de movilidad más allá de los habituales de una cita musical con un elevado número de asistentes”.