Líos, enamoramientos, aventuras y confusiones. Todo tiene cabida en ‘La Ternura’ porque, al fin y al cabo, cada uno la encuentra en un lugar o situación distinta. Qué compleja la forma de buscarla, y qué fácil la de encontrarla en los momentos menos pensados.
El 10 de marzo, el Teatro del Bosque de Móstoles se viste de comedia para narrar la historia de una reina algo maga y sus dos hijas princesas que viajan en la Armada Invencible, obligadas por Felipe II a casarse en matrimonios de conveniencia con nobles ingleses.
Su plan es quedarse a vivir en una isla aparentemente desierta, que luego resulta estar habitada desde hace veinte años por un leñador y sus dos hijos
La reina odia a los hombres, que siempre le han quitado libertad, así que no quiere que sus hijas tengan el mismo destino. Crea, entonces, una tempestad que hunde el barco en el que viajan. Su plan es quedarse a vivir en una isla aparentemente desierta, que luego resulta estar habitada desde hace veinte años por un leñador y sus dos hijos. Paradójicamente, éstos huyen de las mujeres.
Texto y dirección de Alfredo Sanzol, resultado de un trabajo ligado a las comedias de Shakespeare, la obra está más que custodiada por amplias dosis de calidad, a lo que hay que sumar la maestría del reparto a la hora de llevar a escena esta serie de almas atormentadas y corazones salvajes llenos de deseos y temblores.