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Lo que está pasando en nuestro país es extremadamente grave. El informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil revela que (muy muy muy probablemente) hay una gran trama de corrupción en torno a la compra de material sanitario durante la pandemia.

Decepcionante es la palabra que utilizo para describir la reacción de nuestros políticos. Ante una situación tan sumamente clara, deberíamos estar asistiendo ya a una asunción de responsabilidades por su parte. Sobre todo, por parte del presidente del Gobierno.

¿Dónde está Pedro Sánchez? ¿Qué contundencia es esta? Lo suyo sería que el presidente del Gobierno asumiera su responsabilidad política y diera la dimensión que tiene a los millones de euros que se han tirado por el retrete y se han guardado en magníficos monederos digitales a buen recaudo del fisco. Hay una gran sospecha de que lo gordo se lo han llevado a través de sistemas de criptomonedas y esto todavía no ha salido a la luz.

Por higiene democrática y por los valores del propio Partido Socialista, Pedro Sánchez debería convocar unas elecciones.

Pienso estos días en esos socialistas que han dedicado toda su vida al partido, personas de buen corazón que piensan que el bien común debe primar sobre el bien privado. Que golpe tan feo y sangrante que una panda de criminales eche por tierra los valores socialistas.

Lo que me da pena es que los jóvenes tienen su futuro endeudado y ellos mismos están permitiendo que pase. ¿Por qué se manifiestan por la vivienda y no por esto? ¿Será porque lo primero les toca directamente los bolsillos y lo segundo no? Tenemos que despertar y salir a las calles cuanto antes. ¡UNA MANIFA YA!

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