Llevo unos días que me siento un poco triste, un poco enfadada. Todo empezó con una publicación de una chica que no conozco en Twitter. Resulta que estaba muy preocupada porque le había bajado la regla poco después de vacunarse, cuando ella la esperaba varias semanas después. Hoy mismo, unas chicas que sí conozco, publicaban una encuesta en sus historias preguntando si alguna más había sufrido variaciones en su menstruación.
Me da mucha rabia y mucha pena el desamparo que nos pone en contacto en situaciones que vivimos parejas, porque resulta que no hay información. Si nuestra única fuente (de consuelo) es charlar con otras personas con útero para ver que nos está pasando, las cosas no están bien.
A mí la vacuna no me ha afectado en el ciclo menstrual, de momento, pero tampoco nadie me ha advertido de que esto podía pasarnos. Vagas noticias fueron llegando sobre efectos adversos en mujeres, que algunos recuerdan por lo del aumento de pecho. Una encuesta que ha lanzado la Universidad de Granada en relación con los cambios sufridos en la menstruación tras administración de la vacuna, ha empezado a aportar datos: al menos seis de cada diez mujeres han sufrido estas alteraciones.
Se trata de hablar sin tapujos de falta de perspectiva de género en la salud
Repito, yo no he sufrido cambios en mi ciclo, pero sí he sufrido a horrores los dolores que muchas experimentamos con la regla, mes tras mes de mi vida. Un desajuste es algo más complejo: la menstruación afecta a nuestro cuerpo, a nuestra salud y a nuestra calidad de vida, y según estudios que empiezan a salir a la luz, no ha habido casi ensayos en el desarrollo de la vacuna que tuviera en cuenta el factor sexo.
Que nadie se ofenda, no se trata de cuestionar la urgencia de la vacuna, desaplaudir a nuestros médicos, ni desmerecer los esfuerzos de nadie. Se trata de hablar sin tapujos de la falta de perspectiva de género en la salud y la búsqueda de la igualdad también en investigación.
Es muy injusto el descrédito que recibimos cuando hablamos de las cosas que nos afectan; son injustos los prospectos de nueve caras en soluciones médicas como la píldora, y ya que hablamos de todo, el estatus de migajas que nos viene quedando. Me pone tan triste que se me llenan los ojos, pero puede que tan solo sea porque ahorma mismo tengo la regla ¿no?