El secretario general del Partido Socialista, Juan Lobato, ha estado en la sede del Partido Socialista de Pozuelo reunido con los militantes y cargos políticos de la zona noroeste de la Comunidad de Madrid.
En esta asamblea abierta se están abordando los problemas que acucian a la región en materia de sanidad, educación, dependencia y transporte, entre otros. Durante su intervención, Lobato se refirió expresamente al modelo de ciudad en el que se ha convertido Pozuelo. Lobato hizo señaló que “el PP ha ido empujando a Pozuelo hacia el individualismo, priorizando a instituciones privadas y dejando abandonado los servicios públicos, como los centros de salud a los que ha dejado sin urgencias los fines de semana y las noches”.
También planteó que ese modelo es el que “el PP lleva años tratando de instalar en los distintos municipios donde gobierna” y conminó a los asistentes a seguir trabajando en la defensa de los servicios públicos de calidad como verdadera garantía de igualdad, como hacen desde el parlamento regional.
En esta misma línea, el secretario general del PSOE recalcó la importancia de la educación pública para el desarrollo social de la región y criticó, como ejemplo, la situación que sufren actualmente los estudiantes de los centros públicos de Formación Profesional por no tener dónde realizar su práctica profesional, y en consecuencia, no poder titularse. “Son 30.000 estudiantes los que la señora Ayuso está castigando y forzando a moverse a los centros privados que aseguran, previo pago, la realización de prácticas en instituciones privadas”, aseveró Lobato.
Por su parte, el secretario general del PSOE de Pozuelo, Helio Cobaleda señaló, que “son muchos los problemas que tiene esta ciudad, que ni desde el Ayuntamiento ni desde la Comunidad se resuelven. El de la falta de vivienda pública, pues la Comunidad no ha hecho nada en Pozuelo nunca, al contrario que en otras ciudades a pesar de los desorbitados precios existentes, el problema de la falta de un transporte público rápido y de calidad, o de la conservación de las grandes zonas verdes, en peligro, por un urbanismo depredador como en Montegancedo. Esperemos que el Gobierno de Ayuso deje el ruido y empiece a gobernar para todos de una vez”.