Una bola y un palo o stick. Ese es todo el material que han necesitado los vecinos sanseros más pequeños, asistentes del campus de verano del club de Hockey Sanse Complutense, para pasar las mañanas de vacaciones más completas y divertidas.
De hecho, para muchos de estos niños y niñas, se ha tratado de su primera toma de contacto con el hockey, un deporte exigente que, además, transmite valores como el trabajo en equipo y el esfuerzo. En definitiva, todo un reto que han superado con la estrategia de aprender jugando.
Y, aunque le han dedicado en torno a una hora y media cada mañana, no todo iba a ser hockey en este campus. También, han compartido otras actividades lúdico-deportivas y, tras el avituallamiento, sesiones de juegos a la sombra o manguerazos cuando más apretaba el calor.
Los niños han salido jugando... ¡Y deseando volver!
Con esto, el curso se ha convertido en dos quincenas (y una más de pre-campus) repletas de emoción y aprendizaje; volviéndose, ahora, un bonito recuerdo que estos pequeños guardarán para siempre en su memoria.
Es así como 12 monitores especializados han sabido llevar el hockey y la diversión al corazón de los 130 niños y niñas que han pasado por sus instalaciones. Un campus del que han salido jugando... ¡Y deseando volver!
###88801##