Estamos acostumbrados a que los gobernantes del ayuntamiento pinten una realidad de Sanse muy diferente a la real. Llevamos tiempo así, pero la utilización propagandística de los medios municipales ha llegado al límite con la pasada tormenta de nieve. Ahora pretenden convencernos que todo funcionó, aunque la realidad es bien distinta.
Pese a la propaganda, la verdad es que lo vecinos y vecinas se han sentido abandonados, que las famosas quitanieves resultaron no serlo y quedaron atascadas a la primera de cambio, que la sal apareció tarde y que días después las calles y aceras continuaban con hielo y basura. Tampoco el ayuntamiento contrató directamente a ningún parado para limpiar las calles tal y como han tenido que reconocer.
Su mala gestión la intentan enmascarar con propaganda, piensan que son capaces de hacer olvidar las promesas incumplidas, las ayudas que nunca llegan o lo sufrido por los vecinos y vecinas. Desgraciadamente, para ellos no es una necesidad que la información municipal sea veraz, lo importante es que les sea útil.