Tras varias idas y venidas, disputas y desencuentros, el pleno municipal del Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes ha aprobado, por unanimidad de todos los partidos, no aprobar el Plan Especial para la construcción del nuevo cementerio-tanatorio-crematorio privado en la ciudad. Un proyecto propuesto en el año 2019 por el Partido Popular, y que fue apoyado por Izquierda Independiente.
Esta nueva infraestructura contaba, desde sus inicios, con un planteamiento que "hacía aguas", pues se planeaba construir en una zona no urbanizable. La Junta de Gobierno Local de Sanse aprobó un Plan Especial que luego presentó a la Comunidad de Madrid, esta lo rechazó, alegando que para poder presentar el proyecto lo tenían que hacer a través de un Plan de Actuación Especial.
El rechazo a este plan fue secundado, posteriormente, por el propio grupo municipal de Izquierda Independiente, quienes afirmaban que no se debería haber sacado adelante desde la Junta. Secundaban, a su vez, que el proyecto vulneraba la Ley del Suelo, y aseveraban que se pretendía beneficiar a la empresa promotora, perdonando el pago de más de un millón de euros.
La Junta de Gobierno Local de Sanse aprobó un Plan Especial que luego presentó a la Comunidad de Madrid, y esta lo rechazó
Otra de las partes que ha recibido numerosas críticas es el Partido Popular. Algunas formaciones consideran que Lucía Fernández, portavoz de los populares, ya conocía el proyecto que pretendía aprobar el Equipo de Gobierno, incluso antes de que estos lo presentaran en la Junta. Sin embargo, la edil popular ha querido hacer memoria, afirmando que "es conveniente establecer los tiempos de este proyecto fallido para analizar quién miente y quién no".
La portavoz afirmaba que ya en aquella Junta de Gobierno, el proyecto salió adelante con el voto a favor del Equipo de Gobierno, alegando que era la única vía plausible. Días más tarde, el PP solicitó el expediente, es ahí cuando pudieron ver el proyecto. Además, Fernández asevera que, con dicho plan, "no hacen más que perjudicar a nuestros vecinos con este proyecto".
Así, entre dichos y desdichos, el resultado es que no sale adelante el nuevo cementerio privado. Sin embargo, desde formaciones como Izquierda Independiente o Podemos consideran que el Equipo de Gobierno debería empezar a trabajar en un nuevo proyecto, pues el cementerio es una necesidad. Por su parte, VOX considera que este nuevo cementerio debería ser de titularidad pública, y el concejal no adscrito asevera que debería realizarse en una zona alejada de viviendas.
Con el rechazo del nuevo cementerio, la ausencia de un proyecto viable para el mismo, y los enfrentamientos entre las formaciones, probablemente nuestros vecinos se pregunten ¿Qué va a pasar cuando el cementerio municipal llegue a su tope? Seguiremos pendientes.
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