Hace dos semanas conocimos que Madrid aspiraba a convertirse en capital mundial del turismo de lujo, pero ¿qué significa? La propia expresión lo indica, este tipo de viajes solo los realizan gente con un alto nivel adquisitivo, que busca siempre la máxima comodidad en sus vacaciones, tanto en la búsqueda de alojamientos, servicios a su alcance, experiencias… Estos clientes tratan siempre de encontrar una ciudad que pueda proporcionarles todo el lujo que necesiten. Ciudades como Marbella o Montecarlo son reconocidas mundialmente por atraer cada año a millones de “turistas de lujo”. Madrid busca ampliar su horizonte y convertirse en un referente mundial para estos viajeros, pero sin descuidar el turismo convencional. Un día siendo “de lujo” en Madrid podría verse así:
Pasa la mañana en la Galería Canalejas
Se puede ir de compras a muchos sitios, pero ir a la Galería Canalejas es hacerlo de una forma muy diferente. Con más de 15 boutiques de moda, joyería, perfumes y relojes, entre otros, esta galería cuenta con marcas conocidas mundialmente, como Rolex, Cartier, Jimmy Choo o Valentino. Además, cuenta también con un personal experto en moda y una sala exclusiva para que disfrutes de una experiencia única. En cuanto a los precios… únicamente la visita guiada por las galerías es de 229 euros por grupo de máximo 10 personas.
Come en un tres Estrellas Michelin
Comer no siempre ha estado al alcance de todos, y DiverXO, el restaurante de Dabiz Muñoz es un ejemplo de ello. Situado en el hotel NH Collection Madrid Eurobuilding, y con tres estrellas Michelin, este restaurante ofrece a sus clientes una experiencia única, con unos platos muy complejos en los que la gastronomía mediterránea y la asiática se fusionan. DiverXO ha crecido desde su apertura en el año 2007 hasta convertirse en uno de los mejores restaurantes de España, sino el mejor. El sistema de reserva es muy diferente a lo que estamos acostumbrados, ya que, únicamente para poder confirmar asistencia, hay que pagar 365 euros por persona (descontado del precio final el día de la experiencia), que es el precio del menú degustación.
Acude, de la forma más exclusiva, al musical “El Rey León”
El Rey León se ha convertido en uno de los planes que, como madrileño, hay que ir, al menos, una vez. Pero si lo que quieres es aprovechar esa experiencia y exprimirla al máximo, puedes comprar La Butaca Oro, que te ofrece: Visita guiada al backstage 45 minutos antes de la función, copa y cóctel de bienvenida, las mejores butacas para ver el espectáculo, ticket de parking de 4 horas, acceso sin esperas, etc… No hay mejor forma de aprovechar el musical con más éxito en taquilla, y más reconocido mundialmente. Los precios parten de los 100-115 euros.
Realizar todos estos planes cuesta, como poco, 700 euros por persona. ¿Merece la pena?
Acaba el día cenando en la terraza del Círculo de Bellas Artes
Se dice de esta terraza que tiene las vistas más bonitas y amplias de la ciudad de Madrid. Este centro es, además, uno de los más importantes a nivel cultural en España. Exposiciones, teatros, conciertos se celebran allí cada semana. La entrada a la azotea cuesta 5 euros por persona, aunque tomar algo, o cenar allí, puede salir mucho más caro. La carta, hecha por Javier Muñoz-Calero es totalmente mediterránea, pero dándole un toque exclusivo. Disfruta de las mágicas noches de Madrid de una manera diferente cenando en esta azotea.
El ocio nocturno de Madrid, por todo lo alto
Acaba la noche de la mejor manera en el Casino Gran Madrid, uno de los más exclusivos de Madrid. Este casino presume de ser referente en toda la capital, no solo por su gran variedad de juegos, sino por las posibilidades que ofrece. Desde tomar unas tapas exquisitas y los mejores cócteles, también cuenta con el restaurante chino Royal Mandarín, que está especializado en gastronomía cantonesa. También hay eventos, conciertos, torneos de póker, jornadas gastronómicas… aunque, eso sí, este plan tampoco está al alcance de todos los bolsillos.
Madrid cuenta con muchas ventajas para convertirse en la capital mundial del turismo de lujo. Una red de transporte envidiada en todo el mundo, buena comunicación con el resto de España, museos como El Prado o el Reina Sofía, galerías de arte, hoteles que parecen palacios, calles repletas de marcas de alta gama como la Calle Serrano, y una de las mejores gastronomías de Europa. Todo esto avala Madrid, pero aun así, esta tarea no es fácil. Nuestra ciudad debe empezar a llenarse de más planes exclusivos que llamen la atención de los turistas “de lujo” sin descuidar al “turista convencional”, que es quien se deja más dinero en sus visitas a Madrid. ¿Podrán combinarse estos dos tipos de turismo en un largo plazo?