El análisis inmunológico de muestras de lavados nasales permite conocer el tipo de respuesta inmunitaria desarrollada por los niños frente a la bronquiolitis, por lo que esto puede facilitar la investigación y el desarrollo de posibles soluciones terapéuticas, así como el manejo extra-hospitalario de la enfermedad, según se deduce de un estudio llevado a cabo por Investigadoras del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), plasmado en la publicación de un artículo en la revista Frontiers in Immunology. El líquido de lavado nasal se obtiene fácilmente y de forma no invasiva tras introducir líquido fisiológico en una fosa nasal y volver a recogerlo por la otra.
Actualmente no hay tratamiento farmacológico específico para la bronquiolitis, y tampoco hay vacunas. Por ello, uno de los objetivos clínicos es vigilar los casos leves de infección, con el fin de intentar prevenir posibles complicaciones. Las investigadoras que han realizado este estudio señalan que, aunque se han realizado muchos estudios previos utilizando muestras de pacientes hospitalizados con bronquiolitis, hace falta profundizar en el conocimiento de las respuestas inmunitarias de los lactantes que padecen esta enfermedad en un estadio leve o moderado, que no requieren hospitalización, y en los que resulta complejo obtener muestras de sangre o de lavados bronco-alveolares.
Hace falta profundizar en el conocimiento de las respuestas inmunitarias de los lactantes que padecen esta enfermedad
La bronquiolitis es una infección causada principalmente por el Virus Respiratorio Sincitial (VRS), que afecta a las vías respiratorias altas y bajas (a los bronquiolos) y que provoca inflamación y mucosidad, lo que puede llegar a dificultar el intercambio gaseoso en los pulmones. Es un virus estacional con una mayor incidencia en los meses de invierno. Los niños menores de tres o cuatro meses pueden cursar esta infección de forma más grave, ya que sus pulmones y su sistema inmunitario aún no están completamente desarrollados; también tienen más riesgo los prematuros, los inmunodeprimidos y los que tienen otras patologías. El contagio se produce por transmisión aérea (a través de gotas) al hablar, toser o estornudar, y también por contacto al tocar objetos que puedan contener virus (toallas, juguetes, etc.) y después tocarse ojos, nariz o boca. En la mayoría de los casos la bronquiolitis suele ser leve y caracterizarse por síntomas como estornudos, tos, mucosidad y fiebre. Puede precisar hospitalización si se complica con insuficiencia respiratoria, apnea o cianosis por falta de oxígeno. Cuando se agrava, la bronquiolitis infantil se asocia a tasas significativas de morbilidad y mortalidad.
Por ello, este trabajo se ha centrado en analizar muestras de lavados nasales de niños y niñas con bronquiolitis de manejo ambulatorio. El objetivo era desentrañar las respuestas inmunitarias locales de tipo humoral y celular, que no están todavía bien caracterizadas ni definidas en la literatura científica. En el estudio, los niños participantes se dividieron en tres grupos según su edad: niños menores de dos meses, de entre dos y cuatro meses (en ambos casos con un primer episodio de bronquiolitis), y entre cuatro meses y dos años, estos últimos niños con infecciones respiratorias recurrentes. Se valoraron diversos parámetros clínicos para determinar el nivel de severidad de la patología, que fue en todos los casos leve o moderada, de acuerdo a su situación ambulatoria. En las muestras se cuantificaron una batería de virus respiratorios, así como de parámetros humorales (inmunoglobulinas, citoquinas) y celulares.
La investigación está coordinada por investigadoras del Laboratorio de Inmunobiología del Centro Nacional de Microbiología del ISCIII, y cuenta con la colaboración de equipos de las Unidades de Genómica, Investigación en Enfermedades Crónicas (UFIEC) del ISCIII junto a los equipos de Pediatría del Hospital El Tajo, Hospital Puerta de Hierro, Clínica Universitaria de Navarra, y el centro de Atención Primaria de Galapagar. Belén de Andrés, María Luisa Gaspar e Isabel Cortegano son las autoras principales del trabajo.