Se acerca el buen tiempo y con ello celebraciones tales como bodas, bautizos y comuniones. Este año me ha tocado a mí, porque celebro la comunión de mi hijo mayor y con motivo de este evento, me he animado a escribir este reportaje para intentar ayudar a todas aquellas que tengáis el mismo evento que yo o cualquiera de los otros dos. Por ello os voy a dejar la siguiente guía práctica de consejos para ser la invitada perfecta, (y para completarlo del todo también os dejo aquellos looks a los que ya he echado un ojo y os pueden servir de inspiración.) Y sin más preámbulos, comencemos:
1. Tener la mayor información posible sobre el evento:
Lo principal es saber al tipo de evento al que asistes y si existe un dress code que te marque la pauta a seguir. Si no existe, lo fundamental entonces es saber si el evento es civil o religioso, si es de mañana o de tarde, si será al aire libre o no, el lugar… Cuanta más información tengas más fácil será aplicar el protocolo.
2. Conoce bien el protocolo:
El protocolo tradicional dice que no es recomendable vestir de negro si eres invitada directa de alguno de los novios, y por directa se entiende padres o hermanos.
Con respecto al largo de los vestidos, para las celebraciones de mañana suele ser más adecuado el vestido corto y el largo midi, pudiendo arriesgar en las tonalidades. La madrina, las damas de honor y la hermana se podrían saltar este protocolo e ir de largo. Si el evento es de tarde o noche la mejor opción siempre es el largo total o el midi, aunque también se aceptan diseños tobilleros, monos o conjuntos de pantalón. También se permiten introducir las pedrerías y los paillettes.
En lo referente a los tocados, indispensables por la mañana y en todas sus formas. El tocado se deberá llevar hasta después del banquete. Mientras que para las bodas de noche lo mejor es pelo recogido o semirrecogido pudiendo complementarlos con accesorios que combinen con el look elegido.
Pero al igual que os cuento todo esto, he de decir, que cada vez existen menos reglas para asistir bien vestida a un evento y mi recomendación final es que si no sabes qué largo elegir con el largo midi acertarás seguro.
3. Sin disfraces:
La invitada perfecta tiene que ser fiel a sí misma. Cada una sabemos qué es lo que mejor nos sienta y por ello mi recomendación es que no sigas las modas, que apuestes por aquello que te defina, de esta manera te sentirás más segura a la hora de lucir el look definitivo.
4. Lleva una joya especial:
Este tipo de eventos puede ser la excusa perfecta para desempolvar esa joya preciada que solo utiliza en ocasiones especiales. Si no tienes este tipo de joyas en tu joyero, seguro que a tu madre o a tu abuela le hace especial ilusión prestártelas para este día tan especial.
Y si no hay tradición joyera en tu familia y quieres adquirir una para incorporarla a la familia, invierte en diseños clásicos y atemporales que podrás lucir a lo largo de los años y de igual manera lo harán en un futuro tus descendientes.
Con el buen tiempo llegan los grandes eventos ¿A qué esperas para ser la invitada perfecta?
5. El bolso como punto de inflexión:
En versión cartera, clutch, cofre, bombonera, mini o de mano existen infinidad de modelos dónde elegir. Según los expertos aquí es donde puedes arriesgar tanto en colores como en texturas, aunque si eres de las que prefieres asegurar, el dorado o el plateado siempre convencen.
6. Sí al tacón:
Siempre y cuando puedas caminar bien. Por ello tienes que elegir uno con la altura a la que estés acostumbrada, ya que no hay nada peor que ver a una invitada caminando con más tacón del que puede permitirse, jajaja, seguro que se os ha venido la imagen de alguien a la que visteis en esta situación en el último evento al que asististeis.
7. Atención a los accesorios:
Para las bodas un buen tocado o una pamela serán la opción principal mientras que en el caso de la comunión yo me decantaría por accesorios en el pelo o por una diadema, que dan ese toque de distinción pero con la discreción correspondiente. Ya sabéis que hay infinidad de ofertas en el mercado.
8. Maquillaje sin excesos:
Lo más importante a tener en cuenta es evitar el efecto máscara. Para ello es fundamental aplicar adecuadamente una prebase y elegir muy bien el color del maquillaje, en función del color de vuestra piel.
Sobre todo hay que potenciar la luminosidad de la piel y la naturalidad para ir maquillada sin parecerlo. Para los eventos diurnos, la piel tiene que parecer muy jugosa, los tonos pasteles y nude son los perfectos para estas ocasiones, tanto en las sobras y mejillas como en el labial.
Mientras que para los eventos de tarde-noche el maquillaje debe resaltar una zona de tu rostro sin que resulte recargada, quizá la mejor opción es resaltar los labios, aunque los ojos suelen ir más marcados que para los eventos de día.
9. Despeja la cara con un buen peinado:
Las tendencias que se empiezan a ver son los semirrecogidos terminados en un moñito o con corona trenzada, los moños bailarina o los moños con tupé y mechones enroscados y que nuestra Reina Doña Leticia utiliza tanto.
Si te decantas por el pelo suelto se llevan las ondas abiertas y cremosas y las melenas con efecto “bandana” que consiste en fijar el cabello a modo de bandana pasándolo por detrás de las orejas y sujetándolo en la nuca.
10. Presta atención a tu manicura:
El nails art no solo es la opción por excelencia de las novias, sino también de las invitadas. Puedes optar por combinar tus uñas con el color de tu vestido o por arriesgar incluyendo la fantasía, aunque si eres más tradicional, recurre a la manicura francesa que combina con todo.