El Hospital Universitario de Torrejón, perteneciente a la red pública de la Comunidad de Madrid, advierte de que en verano aumentan las condiciones favorables para la aparición del hongo Candida albicans y suele ser común la aparición de la candidiasis. Factores como el calor y la humedad provocan la sudoración, creando ambientes cálidos y húmedos en los que el hongo puede proliferar fácilmente. Además, los baños en piscinas y playas, acompañados por el uso prolongado de trajes de baño, aumentan el riesgo de sufrir candidiasis en zonas genitales, debajo de los senos o en otras áreas del cuerpo.
La candidiasis mucocutánea es una infección fúngica superficial de la piel y las membranas mucosas causada por especies del hongo Candida. “Los principales factores que favorecen la candidiasis son la maceración de la zona afectada por la humedad, la diabetes, el uso previo de antibióticos, el tratamiento con corticoides o la inmunodepresión por cualquier causa”, introduce la doctora Amaya Palomo, Facultativa Especialista de la Unidad de Hospitalización a Domicilio. “La infección puede producirse en diferentes zonas del cuerpo, como los pliegues cutáneos, en la boca o en los genitales y, según la zona a la que afecte, se pueden distinguir varios tipos de candidiasis”, añade.
La doctora recalca que la incidencia de esta patología aumenta considerablemente durante los meses de verano y destaca la importancia de identificar los síntomas para detectarla. En el caso de la candidiasis en los pliegues cutáneos, suele localizarse con mayor frecuencia en los pliegues de las ingles, el glúteo, debajo de las mamas y las axilas, donde puede aparecer una lesión eritematosa con forma de enrojecimiento con una superficie húmeda, brillante y descamativa. Los principales síntomas suelen ser picor, escozor y dolor.
La infección puede producirse en diferentes zonas del cuerpo, como los pliegues cutáneos o los genitales
“En el caso de que la infección sea en la boca, hablaríamos de candidiasis oral y se caracteriza por la aparición de placas blanquecinas de aspecto lechoso en la mucosa orofaringea”, describe. Por último, la vulvovaginitis candidiásica es muy frecuente en mujeres y los principales síntomas son el picor intenso en la vulva y el aumento del flujo vaginal de color blanquecino. En el caso de los hombres, puede aparecer una balanitis, una infección en la mucosa del glande que se caracteriza por lesiones eritematosas y pequeñas pústulas blanquecinas.
“Para el diagnóstico de la candidiasis suele bastar con la observación de las lesiones y los síntomas, aunque el especialista puede pedir un cultivo para obtener un diagnóstico definitivo”, explica la dotora Palomo. Una vez detectada la infección, “será necesario seguir un tratamiento con fármacos antifúngicos que, en función de la zona, se pueden administrar de forma tópica, con enjuagues, cremas u óvulos, y en ocasiones de forma oral”.
Con el objetivo de evitar estas molestas infecciones durante los meses de verano, desde el Hospital Universitario de Torrejón destacan que la prevención pasa por “mantener una buena higiene, evitar la humedad y la maceración de los pliegues cutáneos”. También es importante controlar otros factores que “pueden predisponer a sufrir infecciones por Cándida”, como el uso innecesario de antibióticos y corticoides y se recomienda la realización de enjuagues orales con bicarbonato tras la utilización de inhaladores de corticoides. Asimismo, “las personas con diabetes tendrán que llevar un buen control de su enfermedad”, concluye la doctora Amaya.