El Partido Popular de la Comunidad de Madrid celebró su cena de Navidad con un invitado de honor, el propio presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo. Durante el evento, la presidenta de la región, Isabel Díaz Ayuso, se puso el disfraz de Rappel una vez más para dilucidar lo que les espera para el próximo año. Un 2025 en el que "vamos a conocer tantos y tantos detalles que abochornarían a cualquier país democrático con operaciones de Estado contra el adversario”.
Díaz Ayuso aprovechó para volver a arremeter contra el Gobierno de España, asegurando que el daño que han ocasionado va a ser difícil de revertir. Desde"la desconfianza en el Poder Judicial, en los medios de comunicación, en las propias instituciones, en tantos funcionarios", hasta en la propia "historia de España cuando rompa la caja común y fabriquen una acción paralegal", sentenció la presidenta.
En este sentido, la jefa del Ejecutivo regional lanzó una serie de preguntas al aire en relación a uno de los puntos que, al parecer, más estragos está causando para los populares, la financiación singular que se sigue pactando para Cataluña. Díaz Ayuso cuestionó cómo se podía explicar a los catalanes que "esa no es la forma de convivir, que no se puede estar por encima de la ley con total impunidad, con el dinero de todos".
"¿Cómo puede ser que tengamos un presidente que ha decidido fabricar un bando para batallar contra una parte importante de los españoles, que reescribe la Transición y la pone a manos de Bildu para decir que la Transición y la democracia española son fallidos?", continuó Díaz Ayuso, añadiendo que los españoles no podemos asumir todo esto, no podemos tragar con aquellos que "solo quieren la destrucción de esta nación de siglos, la nación de todos, y que lo hacen desde dentro porque el presidente necesita protegerse mientras machaca el Poder Judicial, a los medios y a los poderes del Estado".
A pesar de lo expuesto, la regidora madrileña quiso guardar un hilo de esperanza hacia la unidad de todos los españoles. Díaz Ayuso también señaló que 2025 iba a ser un año en el que cada vez más ciudadanos vamos a estar en consonancia, "porque nadie votó cambiarnos, nadie eligió dividirnos, nadie pidió mentirnos y no somos lo que el Gobierno pretende".
Por todo ello, el año que viene será de descubrimientos, pero también de mostrar "nuestra mejor versión, nuestra mejor cara. Es el año para apuntalar esa casa común que somos en el Partido Popular, la del centro derecha y todos aquellos que quieren, voten a un partido o a otro, [...] vivir en paz en torno a unos calores, que tienen ilusión por España y por lo que hemos sido".