El Ayuntamiento de Madrid, a través de la Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid (SFM), ha dedicado en el Cementerio de Nuestra Señora de la Almudena un espacio para el duelo perinatal, el parque de Mariposas, en recuerdo a los bebés que fallecieron durante la gestación o poco después de nacer. Una propuesta que ya había presentado el grupo municipal de VOX y, por ende, salió adelante.
Este espacio, el primero que acoge la capital para el recuerdo de estos bebés, ha sido visitado por la vicealcaldesa y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, un día antes de que abra sus puertas, con motivo de la festividad de Todos los Santos.
El origen del espacio parte de la sensibilidad social creciente orientada a crear entornos amables destinados a dar visibilidad al duelo perinatal, que desde SFM se venía detectando. Por este motivo, se ideó e impulsó este espacio a través de la propuesta de una asociación sin ánimo de lucro presentada a la primera edición del concurso de Final de Vida y Apoyo al Duelo convocado por la empresa municipal funeraria madrileña en 2021.
Ubicado en un entorno natural rehabilitado
Este enclave ha sido creado en un lugar preferente que se ha rehabilitado en los últimos dos años en el Cementerio de la Almudena, en un entorno natural, que se concibe como un espacio que contribuya a honrar el duelo de las familias que han sufrido la muerte de un ser querido durante el embarazo o poco tiempo después de nacer, dando cabida a bebés que, en muchos casos, no han sido ni entregados a sus progenitores.
El espacio está compuesto por un amplio espacio de columbarios en pared, columbarios arbusto y una zona ajardinada con rosas híbridas iceberg de color blanco destinada al esparcimiento de cenizas. El recinto consta también de una fuente, un monolito y bancos, todo en color blanco, así como de una placa conmemorativa, en un enclave que invita a la reflexión al tiempo que brinda un espacio simbólico donde recordar y honrar la memoria de estos bebés, constituyendo una ayuda para mantener una nueva relación de las familias con sus seres queridos fallecidos. En el caso de la muerte perinatal es especialmente importante, puesto que hay pocos recuerdos, lugares, símbolos y rituales para hacerlo.
Esta iniciativa, además de ofrecer una alternativa para las familias que deseen utilizar los distintos tipos de unidades de enterramiento de manera individual, ofrecerá también, de manera gratuita, una opción para el enterramiento de aquellos bebés que desde los hospitales madrileños soliciten ser incinerados de manera conjunta, otorgándoles con ello un espacio físico digno e identificado de manera especial que contribuya a mitigar, al menos en parte, el dolor de las familias por las difíciles circunstancias en las que se suelen producir este tipo de muertes.