Somos los que comemos. Cada elección diaria sobre los alimentos que ingerimos afectan en su totalidad a nuestra salud. Muchos alimentos contienen compuestos que ayudan a las funciones básicas de nuestro organismo; facilitando su funcionamiento o por el contrario, desarrollando complicaciones e incluso fomentando el desarrollo de ciertas enfermedades.
El cáncer es una de las enfermedades que más personas padecen en España, siendo la segunda causa de muerte en nuestro país. Esta lista ofrece los alimentos que ayudan a reducir el riesgo de padecer esta enfermedad. El completo de la actividad física también ayuda a mejorar nuestro sistemea inmunológico y prevenir enfermedades como las cardiovasculares.
1. Brócoli
El brócoli contiene sulforafano, un compuesto vegetal que se encuentra en los vegetales crucíferos, que puede tener propiedades anticancerígenas potentes. Un estudio in vitro mostró que el sulforafano redujo el tamaño y la cantidad de células de cáncer de mama hasta en un 75%. De manera similar, un estudio en animales encontró que el tratamiento de ratones con sulforafano ayudó a eliminar las células del cáncer de próstata y redujo el volumen del tumor en más del 50%.
Una mayor ingesta de este tipo de vegetales crucíferos puede favorecer un menor riesgo a contraer cáncer colorrectal. La ingesta general de vegetales aparte de reducir estás enfermedades aportara niveles de fibra adecuados para el proceso digestivo.
2. Zanahorias
La vista no es la única que parte de nuestro cuerpo que se ve afectada por la ingesta de esta hortaliza. Un estudio encontró que una mayor ingesta de zanahorias se asoció con un 18% menos de probabilidades de desarrollar cáncer de próstata. También está muy relacionada con el buen funcionamiento del estómago y el sistema digestivo, reduciendo posibles problemas de cáncer de estómago, incluso del tracto digestivo.
Este alimento también está relacionado con la prevención del cáncer de pulmón. Un estudio analizó las dietas de 1,266 participantes con y sin cáncer de pulmón. Encontró que los fumadores que no comían zanahorias tenían tres veces más probabilidades de desarrollar cáncer de pulmón, en comparación con los participantes que comían zanahorias más de una vez por semana.
3. Legumbres
Las legumbres son ricas en fibra, la cual, según algunos estudios, puede ayudar a proteger contra el cáncer colorrectal. Un estudio hizo seguimiento a 1,905 personas con antecedentes de tumores colorrectales, y encontró que aquellas que consumían más legumbres cocinadas tendían a tener un menor riesgo de recidiva tumoral. Un estudio en animales encontró también que alimentar a ratones con legumbres negras o legumbres blancas, luego de inducir cáncer de colon, bloqueaba el desarrollo de células cancerosas en hasta un 75 %.
4. Canela
La canela es muy popular por sus beneficios para la salud, incluyendo su capacidad de reducir el azúcar en sangre y aliviar la inflamación. Además, estudios de laboratorio con animales han descubierto que la canela puede ayudar a bloquear la propagación de las células cancerosas. Un estudio de laboratorio encontró que el extracto de canela podría disminuir la propagación de las células cancerosas y provocar su muerte. Otro estudio de laboratorio mostró que el aceite esencial de canela suprimía el crecimiento de las células cancerosas en la cabeza y cuello, y también reducía significativamente el tamaño del tumor.
5. Frutos secos
Las nueces de Brasil tienen un alto contenido de selenio, lo que puede ayudar a proteger contra el cáncer de pulmón en personas con bajo nivel de selenio. De forma similar, un estudio en animales mostró que alimentar a ratones con nueces, disminuía la tasa de propagación de las células cancerígenas de mama en un 80 por ciento y reducía el número de tumores en un 60 %.
Un estudio analizó las dietas de 19,386 personas y encontró que comer una mayor cantidad de frutos secos se asociaba con una disminución del riesgo de muerte por cáncer. Otro estudio dio seguimiento a 30,708 participantes por hasta 30 años y encontró que comer frutos secos regularmente se asociaba con un riesgo mínimo de padecer cáncer colorrectal, pancreático y endometrial. Las grasas saludables que contiene los frutos secos ayudan al correcto funcionamiento del sistema circulatorio y previene los problemas de corazón a largo plazo.
Incentivar el consumo de estos alimentos ayudará a reducir el riesgo de padecer cáncer
6. Frutos rojos
Los frutos rojos tienen un alto contenido de antocianinas, pigmentos vegetales que tienen propiedades antioxidantes y pueden estar asociadas a un menor riesgo de desarrollar cáncer. En un estudio, 25 personas con cáncer colorrectal fueron tratadas con extracto de arándano durante siete días, lo que redujo el crecimiento de las células cancerosas en un 7 %. Otro pequeño estudio dio frambuesas negras liofilizadas a pacientes con cáncer bucal, y mostró que disminuían los niveles de ciertos marcadores asociados al desarrollo del cáncer.
Los arándonos poseen propiedades antioxidantes que ayudan al hígado a depurar ciertas sustancias tóxicas de nuestro organismo. Estas sustancias en ocasiones pueden desembocar en ciertas enfermedades, que con pequeños cambios se pueden solventar.
Incluir estos alimentos en postres o acompañando ciertas comidas principales desarrollan pequeños cambios que pueden aportar soluciones a este tipo de enfermedades.
7. Aceite de Oliva
El aceite de oliva está repleto de beneficios para la salud, por lo que no es de extrañar que sea uno de los alimentos básicos de la dieta mediterránea. Varios estudios han encontrado que una mayor ingesta de aceite de oliva puede ayudar a proteger contra el cáncer.
Una revisión masiva de 19 estudios mostró que las personas que consumieron una mayor cantidad de aceite de oliva tuvieron un menor riesgo de desarrollar cáncer de mama y cáncer en el aparato digestivo, en comparación a las personas que tuvieron una ingesta más baja. Otro estudio que analizó las tasas de cáncer en 28 países encontró que las zonas con una mayor ingesta de aceite de oliva tenían menores tasas de cáncer colorrectal.
Intercambiar otros aceites por aceite de oliva en tu dieta es una manera simple de aprovechar sus beneficios para la salud. Puedes rociarlo sobre ensaladas y vegetales cocidos, o intenta usarlo en los marinados de carne, pescado o pollo.
A medida que continúan surgiendo nuevas investigaciones, se ha vuelto cada vez más claro que tu dieta puede tener un impacto importante en tu riesgo de desarrollar cáncer. Se necesitan más estudios y observar los efectos a largo plazo que tienen estos alimentos en los humanos y como estos influeyn directamente en las células cancerígenas Mientras tanto, es una apuesta segura que una dieta rica en alimentos integrales, combinada con un estilo de vida saludable, mejorará muchos aspectos de tu salud.