Por un lado, la RSD Alcalá en su partido contra el Unión Adarve consiguió un valioso empate a uno en un partido en el que el Val volvía a acoger un partido en la matinal del domingo. Había que retroceder hasta marzo del 2018 para que éste fuera a las doce del mediodía. Los rojillos intentaron llevar la iniciativa desde el primer momento y gozaron de más de una ocasión clara que no consiguieron materializar. Queriéndose redimir de los últimos malos resultados (y partidos), lejos de ser precavidos, fueron a buscar a los lobos, pero una chilena de Montejo que acabó entrando por toda la escuadra tras un centro lateral adelantó a los visitantes. Los alcalaínos no se vinieron abajo ni muchísimo menos y quince minutos después Nanclares puso las tablas en el encuentro. Se equilibraron las fuerzas y el partido era de poder a poder. Los cervantinos las tuvieron de todos los colores, pero una vez más no acertaron al finalizar. Incluso Nanclares falló un penalti. El Alcalá mereció más, pero se llevaron tan solo un punto, bueno a priori antes del partido.