Alberto Blázquez, segundo teniente de alcalde y concejal de Seguridad en Alcalá, ha decidido hacer honor a su cargo y llamar "tropa de legionarios" a varios miembros de la Policía local, área por la que él, supuestamente, vela. Unas palabras que ha arrojado durante la celebración del pleno extraordinario en el Ayuntamiento y que, una vez más, dejan en entredicho a nuestro concejal, que no cesa en su empeño de tirarse piedras en su propio tejado.
Además, el edil socialista, ni corto ni perezoso, no ha dudado en comentar los costes que ha supuesto toda la corporación municipal con el Gobierno popular de Bartolomé González, y cómo, supuestamente, se ha reducido este gasto durante las dos legislaturas del actual regidor, Javier Rodríguez Palacios, en un total de medio millón de euros.
Sin embargo, lo que parecen querer omitir desde el actual Equipo de Gobierno, conformado por PSOE y Ciudadanos, es que esta coalición ha costado a los alcalaínos 600.000 euros más de lo que venían pagando a sus dirigentes. Parece que Alcalá, en época de crisis, prefiere aumentar gastos en vez de aliviar a sus vecinos ya que, recordemos que en el año 2020, en plena crisis económica y sanitaria provocada por la Covid-19, decidieron subirse el sueldo todas las formaciones salgo David Cobo, concejal de Unidas Podemos Izquierda Unida. Y, aunque luego algunas renunciaran a esa subida, la intención estaba ahí.
Tampoco puede pasar por alto cómo la "austeridad" de Blázquez llegó incluso a las fiestas de Alcalá
En esta línea, y dejando a un lado el tema estrella de nuestra ciudad (los sueldos municipales), Blázquez ha proseguido su intervención criticando el, a su juicio, elevado número de personal que conformaba la escolta del antiguo alcalde popular. Es en ese preciso momento cuando no ha dudado en llamarles, de manera poco amigable, "tropa de legionarios". Poco se puede añadir a estas palabras, solo agradecer al señor concejal sus palabras hacia aquellos agentes de Policía que, simplemente, ejercían sus funciones.
Si bien es cierto que la crítica iba dirigida, sobre todo, hacia el supuesto derroche de Bartolomé González, lo cierto es que las palabras despectivas han recaído sobre el cuerpo de seguridad, área de la que él es responsable... Señor Blázquez, ¿qué excusa podrá esta vez para intentar maquillar su pequeña, minúscula, ínfima metedura de pata? Probablemente pedir disculpas y ayuda a sus asesores para que le ayuden a preparar unos discursos más respetuosos sea lo mejor, no es que usted brille, precisamente, por su elocuencia y elegancia en los plenos...
Una de las formaciones municipales que se ha hecho eco de estas perlas lanzadas por el teniente de alcalde ha sido el Partido Popular, quienes han querido destacar la "bajeza moral de Alberto Blázquez llega a tal punto que es capaz de cuestionar que llevara seguridad un cargo público cuando mataba ETA, con cuyos herederos políticos pacta ahora Pedro Sánchez. Lo que no tiene justificación es que no entiendan por qué había que llevar escolta y que sigan intentando blanquear a una banda con la que pactan la memoria de este país”.
Tampoco puede pasar por alto cómo la "austeridad" de Blázquez ha llegado incluso a las fiestas de Alcalá. Mientras ciudades con el mismo número de habitantes como puede ser Fuenlabrada han preparado un dispositivo de seguridad con 700 policías para sus fiestas, en nuestra ciudad, y sabiendo la fama que nos precede, tan solo se contaba con un efectivo de poco más de 200 policías, no convocaron ni asistieron a la Junta de Seguridad con la Comunidad de Madrid y la Delegación del Gobierno, y, por si fuera poco, tuvieron que trasladarse policías destinados a las fiestas de San Sebastián de los Reyes a las fiestas alcalaínas porque no daban abasto. ¿Cómo se digiere esto? Que nos lo diga nuestro maravilloso Ayuntamiento.