Ecologistas en Acción ha vuelto a reunir a más 70 asistentes en la actividad de siembra de bellotas y plantación simbólica de especies autóctonas propias del bosque mediterráneo -principalmente encinas- que lleva a cabo desde hace años, destinada a la recuperación del bosque, "demostrando a las administraciones que es posible la restauración ecológica del río Henares, un espacio protegido de la Red Natura, así como implicar a la población en la mejora de los ecosistemas". Cada año se suman unas decenas de árboles (sauces, tarayes, olmos, fresnos, álamos blancos, encinas, coscojas...) y arbustos de una o dos savias que se riegan los veranos de los primeros años para asegurar el mayor arraigo posible, pues "a la pésima calidad del terreno, con abundancia de escombro y material de relleno, se suman unos veranos de temperaturas cada vez más altas durante cuatro o cinco meses".
"En la zona de intervención, y a pesar de la presencia próxima del Henares, existe un acusado desnivel de más de seis metros entre el cauce y la plantación que hace imposible que la humedad del río alcance el grado que necesitan las especies del bosque de ribera o de galería para mantenerse", sostienen desde la Asociación, al tiempo que indican que "la mejora ecológica del espacio fluvial es posible sin transformarlo en parques, beneficiando así tanto a la biodiversidad como a todas las personas que hacemos uso de sus orillas".
La organización ha querido agradecer la participación de las familias que se dieron cita en el evento, "un gesto de compromiso con la naturaleza y las sociedades que sustenta, y que nos acerca a un mundo más sostenible y justo". Tras la siembra de este pasado 4 de febrero, los niños y niñas pudieron disfrutar de un cuentacuentos acerca del cuidado de los árboles. Destacan los más de 12 años de actuación de este colectivo junto al camino de Afligidos, una zona "muy alterada por la construcción en los años 90 del centro comercial La Dehesa; tan sólo unas decenas de metros lo separan de la orilla del Henares, una pequeña banda que aún está más degradada por la presencia de un camino de zahorra, una acera y una talanquera".
La mejora ecológica del espacio fluvial es posible sin transformarlo en parques, beneficiando así tanto a la biodiversidad como a todas las personas que hacemos uso de sus orillas
"El valle del Henares necesita recuperar los encinares, olmedas y bosques de ribera que existieron y dominaron sus paisajes, y que la actividad humana ha reducido a pequeñas muestras de lo que fueron. Aun así, la diversidad biológica del río Henares es muy elevada, pero con poblaciones de flora y fauna muy vulnerables. Para hacerlo posible pedimos al Ayuntamiento de Alcalá de Henares que deje de acercar la ciudad al río, incorporando a sus orillas elementos urbanos, para pasar a acercar el río a la ciudad, renaturalizando y verdeando el gris urbano", concluyen.