De la película 'Víctor Acosta pide la compatibilidad para asesorar a empresas privadas en su tiempo libre', llega la segunda parte, algo inesperada para muchos: Enrique Nogués, concejal del PSOE, reduce su dedicación a un 51%, pero mantiene el sueldo. Así, el edil socialista seguirá cobrando 42.816,59 euros mientras da clases en un instituto.
Ya en el último pleno ordinario de la ciudad, cuando Nogués dio cuenta de esta modificación, el Segundo Teniente de Alcalde y portavoz de VOX, Víctor Acosta, preguntó al aludido qué motivaba esa reducción del 75% al 51% y no al 50%. A ojos de los simples mortales, las causas podrían ser claras, ese 1% de diferencia también supone pasar de cobrar los más de 42.000 euros a 32.112 euros.
A pesar de la posible evidencia, Nogués sacó su arsenal. Tras acusar a Acosta de tener la cara de "cemento armado", explicó que "yo doy 14 horas en un instituto, 14 horas lectivas a la semana, que sería, más o menos, un 35% de las 40 horas semanales que trabaja un trabajador corriente". Por lo tanto, el concejal "podría destinar un 65%" a su labor en el Ayuntamiento de Alcalá, pero "fíjese si soy honesto que me lo bajo al 51%".
¿Diferencia salarial entre el 65% y el 51%? Ninguna. ¿Diferencia salarial entre el 51% y el 50%? 10.704 euros. Si de honra se tratara, sabiendo que va a dedicar menos tiempo a su trabajo como concejal, ¿por qué no permite a los alcalaínos ahorrarse esos diez mil euros?
Además, si a esto le unimos que otra concejala de la oposición, Sara Escudero, perteneciente al mismo gremio que Nogués, decidió reducir su dedicación en el tramo comprendido entre el 25% y el 50%. La edil de Más Madrid asumió, a su vez, cobrar el sueldo más bajo de toda la corporación, 32.112.44 euros. ¿Qué diferencia a uno y a otro? Nada, simplemente, la "honestidad".