Por primera vez en la historia se medían dos equipos de Alcalá de Henares en categoría nacional. Momentos antes del comienzo del encuentro hubo un acto previo para realizar una entrega e intercambios de placas conmemorativas de la cita con todas las autoridades del consistorio cervantino y de la RFFM, con motivo del gran momento que vive el fútbol alcalaíno.
Con buen ambiente en las gradas y ganas de fútbol en una tarde fría, los dos equipos se asentaron en el terreno de juego mostrando un gran respeto y concediendo muy poco. El Alcalá quería ser el dominador teniendo más el balón, mostrando su condición de local, pero el Complutense estuvo muy ordenado, sin cometer errores y esperando su oportunidad.
Las ocasiones brillaban por su ausencia, pese a que los locales lo intentaban, pero cuando todos esperábamos irnos al descanso con tablas en el marcador, un córner botado por Malote en el que apareció Rafael con un gran remate con el pie sirvió para adelantar a los rojillos. Una vez terminada la celebración, el arbitro pito el final del primer tiempo, sentando este gol al Complutense como un jarro de agua fría.
El gol psicológico marcaría el inicio de la segunda parte
Antes de comenzar la segunda parte existía la duda de si el Alcalá podría sentenciar el partido o el Complutense podría volver a empatar el encuentro. A los pocos minutos del segundo tiempo nos quitamos de dudas ya que los rojillos sentenciaron el partido. El colegiado García Padilla decretó la pena máxima por una mano dentro del área, Nanclares quiso resarcirse después del penalti fallado ante el Torrejón en la primera jornada y con un disparo raso ajustado al palo batió a Javi Alonso.
A partir de ahí, el Alcalá tuvo en todo momento el control del partido y los complutenses empezaron a dejar de tener fe en una remontada. Los cambios de Ernesto Gallardo no consiguieron cambiar el partido y los rojillos pudieron seguir aumentando la ventaja en el marcador tras las ocasiones de Izan y Shafa.
El Alcalá se llevó el derbi histórico y le sirvió para conseguir su primera victoria en el Val y dejar atrás su sequia goleadora, mientras que el Complutense demostró que fuera de casa es vulnerable y que ahora es el que entra en una pequeña crisis goleadora ya que tras un inicio de liga soñado, suma ya tres jornadas sin ganar ni marcar.