El Ayuntamiento de Alcalá no cuida el patrimonio natural de la ciudad
El comienzo de la carta es un agradecimiento irónico hacia la falta de modestia del alcalde, quien considera injusto este nombramiento. Y le van recordando en diferentes párrafos todos los méritos que ha logrado para contribuir a la destrucción de la naturaleza y el espacio.
En primer lugar, le comentan que ha promovido una pésima política en la gestión de los residuos, que es uno de los grandes problemas ambientales y de salud en la actualidad. También le han recordado su obstinación por la aprobación de un nuevo Plan General de Ordenación Urbana para ampliar la ciudad, lo que conlleva la destrucción de una parte de la Zona de Especial Protección para las Aves, situada al norte de la ciudad.
En segundo lugar, le han reprochado que sus iniciativas para proteger las zonas verdes y la naturaleza son ineficaces, y no tienen resultados objetivos. Además, ha incumplido la Ley de Protección del Arbolado Urbano. Así como la falta de atención y valoración del patrimonio natural, histórico y cultural de la ciudad, único en el mundo.
Reprochan su falta de compromiso
Por otro lado, consideran que ha puesto en peligro muchos espacios naturales de la ciudad, como el Parque de los Cerros, el río Henares, las faldas del cerro del Viso… Todo por mantener sus competiciones deportivas y sus construcciones de almacenes. También le han criticado la construcción del campo de golf en la finca de investigación agraria de El Encín, algo que se declaró ilegal por sentencia firme.
También le han recordado su falta de compromiso a la hora de aprobar medidas que luego quedan en el aire, como la aprobada en 2010 sobre la biodiversidad. Además de abandonar espacios que pertenecen al patrimonio histórico, especialmente los molinos; y el estado de abandono y suciedad en el que se encuentran las zonas verdes de la ciudad.
EL vertedero de Alcalá sigue produciendo malos olores
Prácticamente al final de la carta, hacen alusión al supuesto sentido del humor del alcalde, que decía que su grupo pretendía fermentar la basura en casa. Han explicado que su propuesta es el compostaje de la materia orgánica, un proceso que, si se realiza bien, evita los malos olores. Y le recuerda lo sucedido con el vertedero de Alcalá, que después de varios años desde su cierre, sigue produciendo malos olores.
Por último, le corrigen alegando que ellos no se mueven por motivos partidistas, y piden al Ayuntamiento responsabilidad y un cambio en los sistemas socioeconómicos. Consideran que la situación ambiental es muy grave, y urge plantear medidas que no destruyan el planeta, sobre todo en este momento, cuando la pandemia está mostrando las consecuencias de no actuar a tiempo.