A pesar de las medidas de protección de los trabajadores que pretenden el mantenimiento de las empresas y los empleos anunciadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la Fundación Nº1 se encuentra ante la incertidumbre de si el Centro cerrará o no. Los trabajadores declaran no haber tenido ningún tipo de información previa por parte del Ayuntamiento acerca de esta decisión y su motivo.

“Desde este último cambio político, hemos sido testigos del abandono progresivo de la dirección en tanto a la relación y manutención de la cartera de clientes, incluso al rechazo de trabajos que, evidentemente son vitales para la viabilidad de la Fundación”. Ya en octubre de 2019 una de las trabajadoras, Beatriz Arévalo, expuso la situación en la que se encontraban los trabajadores y el centro en general. Esta petición iba dirigida a la continuidad del Centro, pero fue rechazada por el Pleno Municipal.

Según Alcalá Hoy, los trabajadores aseguran que la subvención que recibe el Centro es de 187.000 euros, una cantidad que equivale a la remuneración que recibe el alcalde o algunas de las jefaturas de servicio del ayuntamiento. “No es caridad, es un derecho en un estado social de derecho como es España y además va dedicada al pago de crédito hipotecario del edificio”. 

Además, piden que se tenga en cuenta que este centro no es un centro de trabajo ‘normal’, sino que entre la plantilla se encuentran personas discapacitadas que, posiblemente, tengan muchos problemas a la hora de reubicarse en el mundo laboral. “Tenemos serias dudas sobre las intenciones que la dirección tiene para el futuro de la Fundación y de las 35 familias que dependen de ella”.