Además, consideran que “Con estas políticas se hace imposible reducir las listas de espera que se han visto muy aumentadas por la pandemia. Y estamos ante una sesión de “prestidigitación” en doble sentido. El primero es mágico: hacer desaparecer a una persona de un hospital y hacerla aparecer en otro. El otro sentido viene de designación digital: ¡a dedo! Y eso es lo que se está haciendo para dotar de personal cuando ha fallado el voluntario. Y mientras tanto…el ciudadano paciente (por la paciencia que hay que tener) y paciente por su enfermedad, va a verse movilizado de un lado a otro sin que se tenga en cuenta su domicilio cuando puede ser perfectamente atendido en su localidad, en su hospital, ¿o no? La deslocalización de los enfermos, los perjuicios para los familiares no son justificables y menos en la situación actual”.

Desde la Plataforma alegan que se han sustraído grandes cantidades de dinero para usarlas en algo poco útil, y que, con ello, se perjudica a la sociedad y al personal sanitario en detrimento de otras clases que por su “status”, ya están beneficiadas, “¿Cuándo se van a dar cuenta de su nefasta gestión? Y ¿Cuándo llegará el día en el que deberán dar cuenta pública y pagarán por sus irresponsabilidades…?”.