El Gobierno de nuestra ciudad, en el último tramo de su legislatura, va a prorrogar los presupuestos del pasado año durante este 2023, y no parece tener la intención de modificar las ordenanzas fiscales de Alcalá. Con respecto a esta decisión se ha pronunciado la portavoz popular Judith Piquet, que considera que la decisión del que llama "macrogobierno de 17 concejales" responde tanto a la "desidia" como al deseo del Equipo de Gobierno de no debatir unas nuevas cuentas con el resto de grupos políticos de la cámara municipal. Además, Piquet ha criticado que el Gobierno municipal no tenga la intención de rebajar los impuestos a los vecinos alcalaínos.
Concretamente, la portavoz ha declarado: “Llevamos muchísimos años con proyecto de ordenanzas fiscales para cada año. Qué casualidad que el año que no existe ya el Plan de Ajuste el gobierno no realiza proyecto de Ordenanzas Fiscales. No realizan ninguna modificación aunque sea mínima para no tener que debatir las propuestas que pudiéramos presentar los grupos políticos de la oposición, y que en el caso del Partido Popular sería de bajada de impuestos”.
A la líder del PP alcalaíno no solo le molesta la falta de iniciativa del Equipo de Gobierno a la hora de impulsar un nuevo presupuesto, pues también rechaza la naturaleza de las cuentas aplicadas en 2022, que se respetarán en 2023. El PP critica la cuantía destinada al prespuesto destinado a sostener el Gobierno - "600.000 euros más al año, 1.600 euros diarios para que ni siquiera se sienten para cerrar las cuentas de 2023"- y a cubrir gastos en personal directivo y en personal eventual de Alcaldía. El gasto destinado a los puestos directivos, como indican desde el PP, se incrementó en 2021 en un 20%, y el proyectado para sufragar los gastos del personal eventual de Alcaldía ha aumentado en un 158%, tal y como señalan los populares complutenses.
El PP lamenta que en esta cuentas no se refleje ninguna ampliación de aparcamientos ni tampoco un incremento en las ayudas a los comercio y pymes
Con respecto al personal, el PP ha querido señalar también la falta de competencias y presupuesto de varios delegados del Ayuntamiento, como la concejala de Industria y Transición Energética Susana Ropero, que "sigue sin tener ni siquiera un epígrafe en los presupuestos", asegura el PP. El partido ha cargado fuertemente contra la actividad de la Concejalía de Ropero, afirmando que "su área no existe, no tiene ni personal asignado, ni partidas para el gasto".
Otro foco en la crítica de los presupuestos que se van a prolongar recae sobre la reducción del 8% en el presupuesto destinado a la limpieza de Alcalá. Además de oponerse a esta rebaja de 1,6 millones de euros en el presupuesto municipal, el PP lamenta que en esta cuentas no se refleje ninguna ampliación de aparcamientos ni tampoco un incremento en las ayudas a los comercio y pymes alcalaínos.
Desde el Ayuntamiento se han querido defender frente las críticas populares, afirmando que los socialistas han mantenido congelados los impuestos municipales desde 2015, cuando accedió a la alcaldía Javier Rodríguez Palacios. La concejal de Hacienda, Diana Díaz del Pozo, ha declarado: "Estamos trabajando para seguir transformando la ciudad, llevamos más de 100 millones de euros en inversiones y proyectos que verán la luz en los próximos meses, y esto parece molestar en el seno del PP, más interesado en trasladar una imagen negativa de la ciudad".