El Pleno volvió a convertirse en el escenario elegido por los vecinos para manifestarse. Esta vez fue el turno del barrio Reyes Católicos. Hartos de la inseguridad que viven en sus propias casas por las ocupaciones ilegales, los vecinos gritaron ¡basta!
Reclaman una mayor presencia policial porque, dicen, viven con miedo. La situación extrema que atraviesa el barrio hace que los propietarios de las viviendas vean coartado su estilo de vida por las mafias que ocupan los pisos que, en su mayoría, pertenecen a entidades bancarias.
El testimonio de una de las afectadas durante la sesión plenaria celebrada ayer, ponía de relieve la desesperación con la que conviven y reclaman mayor presencia policial.
“Promesas incumplidas”
“No saben lo que es vivir con miedo”, repetía una de las vecinas de Reyes Católicos a los grupos políticos. Los residentes del barrio reclaman una mayor presencia policial como se implantó a finales de 2014 e inicios de 2015.
El barrio recuerda las promesas “incumplidas” del Equipo de Gobierno y ponen el acento en la inacción de la Corporación municipal para acabar con esta problemática y señalaron directamente al alcalde, Javier Rodríguez Palacios. “Nos prometiste más policías para conseguir nuestros votos”. Una promesa que, según su testimonio, sí se cumplió durante los primeros meses de la legislatura.
¿Qué tontería es esa de que los mediadores sociales sustituyen a la Policía?
Medidas
El Equipo de Gobierno se defendió de las acusaciones de los vecinos y del contenido de la moción presentada por el grupo España 2.000, asegurando que está habilitado el número 900 para denunciar, de manera anónima, las ocupaciones ilegales y ha defendido la actuación policial. “¿Qué tontería es esa de que los mediadores sociales sustituyen a la policía?”, espetó la concejala de Seguridad, Yolanda Besteiro, al portavoz de España 2000 Rafael Ripoll ante su afirmación. “La Policía pasa pero no para”, aseguraba Ripoll.
Lo cierto es que esta realidad no se circunscribe al barrio Reyes Católicos. Otras zonas de Alcalá de denuncian la misma situación con un único deseo, "vivir en paz".