El salón de Plenos de Alcalá de Henares se abría el pasado día 20 de mayo con el objetivo de “dar destino al superávit de 25 millones de euros generado el pasado año 2018, del cual se podía destinar a inversiones 12 millones”, explicaban fuentes municipales. Fue entonces cuando se procedía a estipular el destino de 9,5 millones de euros, lo que, en palabras del ayuntamiento, constituye “un ejercicio de responsabilidad” puesto que “su aprobación permite que se pueda avanzar en licitar inversiones tan fundamentales como la mejora de calles de la ciudad o el inicio de la reforma del alumbrado de toda la ciudad que comenzará en el Distrito II”, aseveraban.
A pesar de que la moción salió adelante con los votos favorables del equipo de Gobierno, el Partido Popular y Ciudadanos votaban en contra de estas inversiones, “que de quedarse sobre la mesa, supondrían un retraso tan grande que difícilmente se podrían licitar a lo largo del presente 2019”, apostillaba el consistorio complutense.
Ciudadanos considera que lo aprobado en el Pleno puede ser nulo de pleno derecho y podría dar lugar a responsabilidades ante la Justicia
Versión ‘naranja’
El equipo de Gobierno ha comprometido a cuatro días de las elecciones las inversiones correspondientes a 2019 y 2020, condicionando e hipotecando las decisiones de un futuro gobierno “de otro color político”, rebatía la formación naranja. Es por ello que ahora estudian impugnar el último Pleno municipal ante una presunta irregularidad y defecto de forma en su convocatoria puesto que la misma “no contemplaba la aprobación de ese punto, sino simplemente dar cuenta” y, añaden, “toda aprobación de modificación de créditos debe ser un acto explícito del Pleno siendo insuficiente la fórmula de ‘dar cuenta’, lo que supone un grave defecto de forma en la convocatoria del mismo, tal como quedó puesto de manifiesto en la sesión”.
Debido a esta irregularidad, Ciudadanos considera que lo aprobado en el Pleno puede ser nulo de pleno derecho y podría dar lugar a responsabilidades ante la Justicia. “Esto fue lo que motivó un rotundo no, y no la negativa a los proyectos financiados con estas partidas, que efectivamente suponen una mejora para diferentes barrios de la ciudad”, concluían.