El 11 de marzo es una fecha grabada a fuego en la memoria de la ciudad de Alcalá de Henares. Tal día como hoy, -hace 17 años ya-, como cada mañana cientos de personas subieron a un tren sin si quiera sospechar que para muchos sería un tren sin retorno. Hoy es un día para recordar la herida abierta en nuestra ciudad, un día para recordar a todas las víctimas inocentes de la barbarie del terrorismo.
Esta mañana, el alcalde Javier Rodríguez Palacios y representantes de los grupos políticos de la ciudad han realizado un homenaje a las victimas, en el monumento dedicado al 11-m frente a la estación. A los pies del pilar en el que se recogen los nombres de los fallecidos en nuestra ciudad, -que fue una de las más afectadas-, han depositado una corona de laurel y han guardado un minuto de silencio cortado por el sonido de los trenes llegando a la estación.
El 11 de marzo de 2004
El 11 de marzo de 2004, se produjo uno de los atentados más terribles de la historia de España. Murieron 191 personas y más de 1.800 resultaron heridas. Se depositaron 12 bombas escondidas en mochilas y bolsas que estallaron casi a la vez casi a la vez: entre las 7:37 y las 7:40. Diez de los artefactos estallaron en las estaciones de El Pozo y Santa Eugenia. Las dos bombas que no llegaron a explosionar fueron detonadas de forma controlada por las fuerzas de seguridad. La víctima 192 del atentado fue un GEO asesinado en un piso de Leganés mientras se efectuaba la detención de los sospechosos.
Al día siguiente toda España salió a las calles para manifestarse contra la barbarie. Se contabilizaron casi 12 millones de ciudadanos en todas las ciudades del país, en las que se consideran las mayores manifestaciones de la historia de la democracia.