El pasado 20 de noviembre, el Consejo General de la Empresa Municipal de vivienda de Alcobendas (Emvialsa) aprobó la reducción en concepto de IBI que pagarán los inquilinos de las viviendas que gestiona esta entidad. La medida fue aprobada por mayoría absoluta y con la abstención del Partido Popular. A partir del 1 de enero de 2020, todas las viviendas de esta empresa pública gozarán de un descuento que, en este primer año se sitúa en un 15%, pero que se incrementará hasta el 60% en 2023, según el compromiso del gobierno del PSOE-Ciudadanos en su acuerdo de investidura.
El vicealcalde de Alcobendas y presidente de EMVIALSA, Miguel Ángel Arranz, ha asegurado que “lograremos que Alcobendas sea la ciudad con menor presión fiscal de la Comunidad de Madrid. Este es un paso más en el cumplimiento de nuestro objetivo de rebajar impuestos a las familias y las clases medias”. Además, ha aprovechado para recordar que el IBI del resto de las viviendas de la ciudad se encuentran en el mínimo legal.
Emvialsa asumirá año tras año un mayor porcentaje de gasto de este impuesto
Descuentos paulatinos
Las viviendas afectadas por esta reducción son las 136 en la calle Carlos Muñoz Ruiz; 141 en la calle Miguel de Cervantes; 77 en la calle Navarra; 43 viviendas rehabilitadas y también los 30 alojamientos dotacionales en C/ Teresa de Calcuta recientemente sorteadas.
Además, según señalan en el comunicado del consistorio, Emvialsa asumirá año tras año un mayor porcentaje de gasto de este impuesto, llevándose a cabo estas reducciones de manera paulatina. En concreto, el descuento que se llevará en el año 2020 es de un 15%, lo que supone unos 45 euros al año, en 2021 un 30%, traduciéndose en unos 95 euros al año, en 2022 un 45% o 135 euros al año y en 2023 un 60%, sumando un ahorro de 180 euros al año.
Arranz ha puntualizado que “de esta manera, y gracias al esfuerzo de este Ayuntamiento, cada familia dispondrá de 440 euros más para gastar durante los próximos 4 años”.