El concejal no adscrito del Ayuntamiento de Alcobendas, Miguel Ángel Arranz, ha acusado al actual alcalde en funciones, Rafael Sánchez Acera, de haber censurado la moción que iba a presentar en el próximo pleno, que ha sido retirada del orden del día. La moción en cuestión era para reclamar que se aprobasen las mociones ya aprobadas anteriormente en otros plenos de Alcobendas y que todavía no se han ejecutado.
“En esta ocasión, y ya van dos, el alcalde del gobierno tripartito ha vetado no la propuesta que yo llevaba al Pleno de Alcobendas, sino que ha vetado la voz de los vecinos de Alcobendas a los que yo represento. No me van a silenciar, no me van a callar, y al igual que hice antes como vicealcalde y ahora como concejal de la oposición, voy a seguir defendiendo y llevando la voz de mis vecinos al Pleno del Ayuntamiento de Alcobendas” ha afirmado Miguel Ángel Arranz en un vídeo difundido por las redes sociales.
Según el ex vicealcalde de Alcobendas de Ciudadanos, “esta maniobra por parte del alcalde del tripartito que gobierna Alcobendas, lo que pretende es crear una cortina de humo y desviar la atención en el Pleno de la rendición de cuentas sobre el desmesurado gasto de las comidas de los concejales del equipo de gobierno. Quieren desviar la atención para que pase desapercibido que la abultada cuenta de esos auténticos banquetes de los que disfrutan los concejales del equipo de gobierno, la pagan los vecinos de Alcobendas”.
Pretende es crear una cortina de humo y desviar la atención en el Pleno de la rendición de cuentas sobre el desmesurado gasto de las comidas
No es una moción es un "ruego"
Tal como ha recogido Diario de Alcobendas, lo cierto es que las palabras Arranz no son del todo precisas con la realidad de lo sucedido, pues no ha sido el alcalde de Alcobendas quien ha retirado su moción sino la Secretaría del Pleno que ha considerado que la petición hecha por el concejal no adscrito debería considerarse como un ruego.
“Las mociones enunciadas son del tipo previsto en el artículo 93.6 del R.O.P. No cabe mocionar la exigencia de mociones que son meras recomendaciones. Estaríamos en presencia de un ruego”, ha asegurado en un informe la Secretaría. De hecho, la única relación que tiene el actual alcalde de la ciudad con esta decisión es que era él quien presidía la junta de portavoces en la que se han decidido el orden del día del próximo pleno de marzo y ha firmado como tal.