Cuando en agosto se conoce el calendario de la próxima temporada, El Molinón es uno de esos estadios en los que puntuar parece un milagro. Sobre todo, por tener que visitar a un equipo histórico del fútbol español. Ambos conjuntos llegaban al partido sumidos en una mala racha. El Alcorcón llevaba casi un mes sin ganar; el Sporting, por su parte, había ganado solo uno de sus últimos siete partidos.
Y con esta dinámica, tenía que ganar el equipo que mejor aguantase la presión. El Alcorcón salió sin complejos, aguantando las embestidas locales y esperando su momento para atacar a un Sporting que, moralmente, estaba hundido. Y el primer golpe no tardaría en llegar. Un centro medido de Laure lo remataba de una manera perfecta Óscar Arribas para poner el 0 a 1 en el marcador.
Su testarazo llevaba los primeros pitos a las gradas rojiblancas, que se empezaba a poner nerviosa ante la situación de su equipo. Y las quejas aumentarían tras el tremendo gol de Stoichkov cuatro minutos más tarde. El gaditano, tras una jugada para enmarcar, anotaba el segundo tanto alfarero, ampliando la distancia en la primera media hora del encuentro.
Los de Alcorcón son undécimos y recibirán el sábado, a las 16:00 horas, al Almería, uno de los conjuntos con más opciones de ascenso
Una distancia que ya sería insalvable para los locales tras el gol de Boateng en el minuto 40. El Alcorcón jugaba a placer en un estadio que se resignaba a una situación que parece tener una difícil solución. Y así se llegaba al descanso.
En la segunda mitad, los locales lo intentarían con más intención que acierto, consiguiendo el gol de la honra en el minuto 91 por medio de Uros Djurdjevic. El Alcorcón volvió a sumar los tres puntos en un partido que, más allá de lo deportivo, sirvió para recuperar la confianza perdida.
Los de Alcorcón son undécimos y recibirán el sábado, a las 16:00 horas, al Almería, uno de los conjuntos con más opciones de ascenso de todo el campeonato. Toca seguir sumando para ir escalando en la clasificación.