La edil admitió que el estado del asfaltado en la localidad era pésimo desde hacía meses atrás, pero que con la llegada de Filomena y los posteriores días de temperaturas gélidas empeoraron los firmes, debido a que, según la concejala: "la sal se filtró y se heló, es un corrosivo y con el agua congelada aumentó aún más las grietas, durante Filomena utilizamos 360 toneladas de sal, cuando acostumbrábamos a depositar cuatro por temporada".

La concejala también comentó el por qué de la drástica reducción del presupuesto ,en asfaltado,  cifrado inicialmente en más de 400.000 euros y adjudicado finalmente a la empresa de Asfaltos Augusta S.L. por 198.000 euros, y nos explicó a que se destina el dinero sobrante.