El nuevo curso se aproxima y, con él, la necesidad de hacer cambios y mejoras en las ciudades. Desde Televisión Digital de Madrid hablamos con Alberto Escribano, candidato del Partido Popular a la alcaldía en Arganda del Rey, para desgranar aquellos aspectos de nuestra localidad que se deberían solucionar o, incluso, incorporar de cara a este nuevo ciclo. Desde la subida del IBI para las empresas al máximo legal, pasando por la falta de limpieza, hasta un aumento de la inseguridad en la ciudad, Escribano tiene mucho que contar.
P: Desde Televisión Digital de Madrid nos gusta acercar al público la actualidad política de los municipios, que son las ciudades donde viven nuestros vecinos y donde les interesa conocer cuáles son esas tareas pendientes o esos retos que tiene Arganda.
R: Tenemos varios retos, pero hay uno que destaca por encima de todos, y es un problema que no teníamos hace escasos meses, y que lo tenemos ahora porque se lo ha buscado, directamente, el alcalde de Arganda, Guillermo Hita. En Arganda tenemos el segundo polígono industrial más grande de la Comunidad de Madrid, tanto en número de empresas como en extensión y, hace dos o tres meses, el alcalde lo que ha decidido es triplicar el IBI a casi 500 empresas de nuestro polígono. Esto quiere decir que empresas medianas y pequeñas pasan de pagar, por decirte un ejemplo, la Cooperativa vinícola de Arganda, de 15.000 euros a 35.000 euros. Es un auténtico hachazo que se ha hecho, porque el Ayuntamiento ha decidido subir al máximo legal el tipo municipal del IBI industrial, esto es algo que hay que revertir.
Otra de las tareas pendientes a juicio del PP es que tenemos un problema de gestión. Arganda lleva prácticamente ocho años sin inversión, no hay ninguna infraestructura nueva que se haya puesto a disposición de los vecinos, no hay nada nuevo, parece que es algo exagerado, pero es así, y no es porque no haya dinero, este año hay caso 20 millones de euros de inversión en los Presupuestos municipales, de estos 20 millones probablemente hayamos ejecutado hasta el momento 3 o 4 millones. Creo que hay un problema de gestión y que hay que solucionarlo.
A raíz de esto, el mantenimiento de la ciudad brilla por su ausencia, y esto creo que es algo que se ve. La limpieza es básica, la apariencia de nuestras calles es lo más básico de lo que se tiene que preocupar nuestro alcalde, y esto no lo está haciendo.
Es un auténtico hachazo que se ha hecho, porque el Ayuntamiento ha decidido subir al máximo legal el tipo municipal del IBI industrial, esto es algo que hay que revertir
P: A parte de esta problemática, hay otro asunto que también habéis tratado, el tema de la seguridad. ¿Cuál es la percepción que tenéis ahora mismo de la misma en la ciudad?
R: Yo siempre digo que Arganda no es una ciudad insegura, además, aquí la Policía Local y la Guardia Civil hacen un trabajo extraordinario, tenemos la suerte de contar con los dos cuerpos. Pero, a pesar de que no es insegura, Arganda es una de las ciudades donde más ha aumentado la inseguridad o, dicho de otro modo, donde más ha aumentado la delincuencia, así lo reflejan los datos del Ministerio del Interior, no es algo que me invente yo.
Nosotros venimos denunciándolo durante toda la legislatura, el alcalde pone excusas. Yo creo que alguien robe no es culpa de él, pero lo que tenemos que hacer es reconocer el problema porque sino es imposible encontrar una solución. Por ponerte un ejemplo, aquí en Arganda llevaba muchísimos años la Comisaría de Policía Local en el barrio de La Poveda, un barrio que está a 2,5 kilómetros, aproximadamente, del centro de la ciudad. Esta Comisaría la abrió el PP, estableció que allí siempre habría presencia policial y hace un año se eliminó, se cerró.
La Poveda dejó de tener presencia policial continua porque el alcalde lo decidió. Son cosas que hay que solucionar, porque esto sí que es algo que les importa a los vecinos. Además, el Ayuntamiento de Arganda no cuenta con ningún concejal de Seguridad, esta competencia no está delegada en nadie, la tiene asumida el propio alcalde, y creemos que esto no ha funcionarlo, por lo tanto hay que revertirlo.