Arroyomolinos continúa con el foco puesto en la Policía Local de la ciudad y en el óptimo desarrollo de su actividad. Después de ser uno de los municipios pioneros en proteger a sus efectivos de un posible contagio de COVID-19 con casi 20 medidas de seguridad y de donarles numerosos equipos de protección para realizar su labor, el consistorio arroyomolinense suma un nuevo equipamiento a los coches patrulla del cuerpo municipal.
En este caso, más allá de la emergencia sanitaria actual por la pandemia de coronavirus en nuestro país, el Ejecutivo local ha decidido invertir en un útil que puede salvar vidas en cualquier circunstancia, incluso cuando la nación se sobreponga al azote del virus. La Concejalía de Seguridad Ciudadana ha incorporado, en cada uno de los coches patrulla de la Policía Local de Arroyomolinos, desfibriladores móviles.
La muerte súbita cardíaca es una de las causas más frecuentes de muerte en los países desarrollados como España
Aparatos que, con su presencia en los vehículos policiales, permiten a los agentes atender emergencias cardíacas in situ hasta que lleguen los servicios médicos. La presencia de estos aparatos sirve para tenerlos a disposición en cualquier aviso que reciban los agentes, "y poder dar una respuesta mucho más eficaz", según ha declarado la propia alcaldesa, Ana Millán.
La muerte súbita cardíaca es una de las causas más frecuentes de muerte en los países desarrollados. En España, se producen alrededor de 30.000 casos cada año (más de 82 cada día), y se estima que las posibilidades de sobrevivir sin secuelas a una parada cardíaca extra hospitalaria oscilan entre el 5 y el 11%, según la literatura científica actual. La rapidez con la que se trata al paciente en estos casos es clave: por cada minuto que pasa sin poder actuar, se reduce un 10% la supervivencia.