Con el inicio de las obras de soterramiento de la A-5 comienzan dos años de trabajos que están condicionando la circulación de vehículos del suroeste de la región, una zona que depende, en gran medida, de las comunicaciones por carretera como única alternativa.
Juan Carlos García, concejal de Movilidad de Arroyomolinos, considera que la finalización de las rutas del transporte interurbano en Cuatro Vientos es "una equivocación", ya que "la estación no está preparada, y ahora, en los regresos, hay colas interminables de usuarios esperando en la calle". Además, se muestra crítico con el hecho de que no se hayan incrementado las frecuencias de las líneas interurbanas.
El edil también se ha pronunciado sobre el carril Bus habilitado desde Móstoles. En este sentido, el Ayuntamiento de Arroyomolinos solicitó que éste empezara a la altura del centro comercial y de ocio intu Xanadú, aportando la posibilidad de utilizar una parcela de titularidad municipal como aparcamiento disuasorio: "el 2 de diciembre me puse en contacto con el ministerio y les hice la propuesta por escrito, pero de momento no sabemos absolutamente nada", señala. "Ése tramo es un absoluto fracaso; de cinco carriles se pasa a uno, y ya ha habido problemas de siniestralidad por los cruces", añade.
Otra de las muchas peticiones realizadas por parte del consistorio en este ámbito ha sido la gratuidad de la R-5 en hora punta, si bien, por el momento, sólo se aplica a los autobuses. "Nos hemos ofrecido incluso a costear el importe para los vecinos de Arroyomolinos, pero tampoco hemos tenido contestación", manifiesta García.
La A-5 es nuestra única vía de escape
Por otra parte, también hemos tenido la oportunidad de hablar sobre los nuevos Presupuestos para la localidad -que serán los más altos de la historia del municipio-, la congelación de impuestos y la entrada en vigor de la nueva tasa de basuras. Haz clic en el Play para acceder al contenido completo de la entrevista.