Sabíamos que no iba a ser sencillo, sabíamos que tendríamos que trabajar y sufrir mucho para mantenernos en una de las categorías más complicadas del fútbol español. Pero lo hemos logrado. El Internacional de Madrid-Boadilla ha certificado su permanencia en el grupo 1 de la Segunda división B en su primer año en la tercera categoría de nuestro fútbol nacional.
Y lo consiguió como mejor saben estos logros. En la última jornada, con todo en contra, los boadillenses lograron ganar al Guijuelo por la mínima –con un gol en los últimos 5 minutos- y aprovecharon la derrota de un Celta B al que mandaron a los puestos de descenso. Alegría doble para uno de los conjuntos más humildes de la categoría, un recién llegado que quiere seguir escribiendo su historia en Segunda B.
La receta era tan complicada como simple: había que ganar a un Guijuelo ya salvado y esperar a ver qué hacía el Celta B. Pero el juego psicológico es muy importante a estas alturas de la temporada y, por ese motivo, el Inter salió con todo a por la victoria. Gracias a ese ímpetu, los de Boadilla del Monte se adelantaron en el marcador en el primer minuto de partido. Un cabezazo de Ariel López a la salida de un córner servía para poner el 1 a 0 en el marcador y meter presión, desde la distancia, a un cuadro celtiña que se la jugaba en casa ante el Salamanca.
Herrero, minutos más tardes, tenía en sus botas el segundo tanto del Inter, pero el portero del Guijuelo alejaba la sentencia de los de Marcos Jiménez. El Inter era muy superior, pero la poca distancia en el marcador mantenía los nervios a flor de piel.
En el minuto 87 de partido, Fran Cortés remataba de forma magistral un balón puesto desde la banda para poner en ventaja a los nuestros
Mayor emoción
Las noticias que llegaban de Vigo eran positivas. El Celta comenzaba perdiendo contra los salmantinos. Sin embargo, un gol de Iván Salvador ponía las tablas para el filial vigués, que volvía a coger aire en “su” final. En el Ángel Nieto, Jesús Tamayo ponía el 2 a 0 antes del descanso, aunque el árbitro anulaba su tanto por fuera de juego.
Y como aún quedaban muchas emociones por vivir, Guijuelo empataría con un gol en el minuto 66. Los nervios se apoderaban de un equipo joven que era sabedor de que lo tenía en la mano. Además, las noticias que llegaban de Vigo no podían ser mejores: el Celta B perdía por 1 a 2 contra el Salamanca.
Pero había que marcar. Solo valía ganar para salir del pozo y meter al Celta. Y llegó. En el minuto 87 de partido, Fran Cortés remataba de forma magistral un balón puesto desde la banda para poner en ventaja a los nuestros en una tarde calurosa y emocionante. Pitido final y el Internacional de Madrid continuará siendo equipo de Segunda división B.